Resurrección en la margen izquierda

"Todos quieren asegurar su futuro donde ni siquiera hay presente y así la juventud se hace despreciable. Hartos de mentiras, a gritos, y con la verdad por silencio, hemos recorrido nuestro camino, ¿... que no tenemos razón?, ¡qué importa! El tiempo nos dará la razón, mañana estará todo viejo y nosotros estaremos muertos". Declaraciones casi proféticas, reflexiones sobre el rock, la música, la droga, la vida en la margen izquierda de Nervión... Palabra de Iosu Expósito que el escritor Beñat Arginzoniz hilvana magistralmente en texto corridos que se intercalan, como monólogos, como pensamiento encadenado, como islas en medio de su relato novelado de los últimos días de vida del líder de Eskorbuto. Pasión y muerte de Iosu Expósito se titula la novela del autor bilbaíno, una obra que, sorprendentemente, brilla por su actualidad y que reedita El Gallo de Oro. Una resurrección de un mundo en crisis, de una juventud en crisis. La resurreción de la palabra y el ideario del controvertido músico con todas sus luces y sus sombras.

Porque Pasión y muerte de Iosu Expósito, además de centrarse en los últimos días del guitarrista vasco atrapado por la heroína y de su toma de conciencia de la llegada del final, es el espejo de una juventud que empezaba a sufrir los efectos del paro, anclada en una época sin grandes perspectivas de futuro, que ve en las drogas un símbolo de oposición al sistema, la misma que después se convertiría en su propia cárcel. Porque Arginzoniz, con una adictiva prosa poética, nos lleva de la mano a la margen izquierda de la ría de Bilbao de los noventa para recordarnos el estallido de un mundo tras los fuegos artificales del 92 (Juegos Olímpicos de Barcelona, capitalidad cultural de Madrid, la Expo de Sevilla..) y para fijar nuestra mirada en la marginalidad en medio de la euforia.

"Esta historia, todo, estaba en mí desde hace muchos años, como parte consustancial de mi vida. Todo salió solo y por necesidad, es una novela que no responde a una decisión, no nace de propósito ni de intencionalidad alguna, nace, como digo, de la necesidad", explica el escritor que publicó por primera vez la obra en 2012 y que ahora vuelve a la vida, además, con la colaboración del dibujante Detritus (Florencio Aramburu) un "gran artista" que con sus ilustraciones "no sólo ha complementado" el relato, sino que tienen "una lectura propia". "Sus dibujos de carácter existencialista tratan sin tapujos el dolor y la angustia, transmiten una extraña y desasosegante belleza. Su obra es tortuosa porque llega a las últimas cosas, al dolor que a todos nos hermana y nos constituye", define el autor que también es cofundador del sello El Gallo de Oro y librero desde hace diez años.

"Por necesidad", repite Beñat, "y por agradecimiento". Son los motivos principales por los que decidió contar la historia de Iosu y de la mítica banda bilbaína pues por sus páginas, que se mueven entre la ficción y la realidad, desfilan personajes reales, amigos y miembros del grupo como Ladys Ramone y Jabi Arroyo. "También hay parte de excusa literaria, pero realmente yo escribo sobre lo que he vivido, hablo de lo que conozco, de una pasión y de unas circunstancias que han podido ser similares a las mías", decide.

Por eso, Arginzoniz, que estudió Psicología y Psicoanálisis, no se arruga cuando le pedimos una descripción de Expósito, al que veía como "un chaval de barrio, de origen humilde, muy consciente de las injusticias sociales". "Una persona romántica y con mucha vitalidad y, puestos a utilizar adjetivos, también podría decir que fue una persona sensible, y, en contra de lo que pudiera parecer, tímida. También fue tozudo, muy suyo, difícil de aguantar", retrata sobre un hombre que pasó sus últimos años "aquejado de fuertes depresiones, pero siempre esperanzado, sabiendo que si para él ya había acabado todo, no era así para los chavales más jóvenes, ellos debían continuar luchando por la dignidad", opina el autor.

Un hombre, cuyo grupo, Eskorbuto, fascinó a toda una generación por sus letras antisistema, su estética punkie y su rebeldía.Un hombre que, según piensa el escritor, de estar vivo hoy no podría respirar. "No lo creo, para él la hipocresía era algo insoportable. De seguir vivo me lo figuro como un hombre decepcionado con el prójimo, un hombre triste y solitario. Hoy Iosu sería una persona desdichada, quien diga lo contrario se equivoca por completo. Creo que pocas opciones más le quedan a alguien que no se vende… Quizá la ironía...", medita.

Ironía que también se destila en las páginas de Pasión y muerte de Iosu Expósito junto con momentos narrados con ternura, hasta dulzura... Y es que el autor opta por "diferentes formas" a la hora de abordar la historia. Así, la novela contienen "conversaciones fluidas, rápidas" donde se usa"un lenguaje marginal, urgente, "es la palabra viva y húmeda de la calle", define Beñat. Pero por otro lado, hay capítulos muy poéticos, sobre todo los que transcurren en el hospital, los que presagian el final, "ahí la palabra realiza su vuelo herido empujada por el soplo de la muerte pues sólo poéticamente es posible describir con exactitud esas situaciones últimas", asegura el escritor que también ha reflejado el pensamiento de Iosu "buscando un efecto que resulte ser algo así como el ruido del pensamiento en medio del silencio total de la novela".

De hecho, ese yo interno de Iosu bebe de declaraciones reales del músico. "Están tomadas de entrevistas, yo las he yuxtapuesto e hilvanado, dándoles forma". Ideas que impactaron en la juventud de un Bilbao que se sigue pareciendo al de ahora. "Continúa la miseria, el paro, la humillación…, pero ahora se añade una hipocresía y un control social desconocido hasta ahora", valora Arginzoniz que se lamenta de que se haya convertido a Bilbao -como a otras tantas ciudades del país- en "una ciudad de servicios", en "otra ciudad para la mediocridad". Posiblemente, Iosu estaría de acuerdo.