Alarma en la calle Bendición de Dios

Los vecinos de la calle Bendición de Dios se alarmaron ayer al ver salir gran cantidad de humo de la lechería allí situada esquina con la calle Enrique de las Marinas. Fueron llamados los serenos y los guardias municipales y como no fue posible localizar al dueño del establecimiento se procedió a abrir la puerta con una palanqueta. Resultó que se había prendido fuego en unos trapos, pero era más el humo que las llamas. Como siempre ocurre en estas ocasiones un gran número de curiosos se dio cita en la calle.

Decomiso. Ayer por la mañana se procedió a examinar numerosa mercancía en el mercado. Se decomisaron siete barriles de arencones en mal estado que fueron arrojados al mar.