Una aventura única y gratificante. Así define Cayetano Rivera su experiencia alrededor del mundo de la mano de la Fundación Yo Niño, que ha celebrado la llegada del ex diestro tras 80 días de viaje con una cena benéfica, que tuvo lugar ayer en Madrid. En la cita, Rivera compartió con sus amigos sus mil vivencias en esta aventura solidaria cuyos beneficios irán destinados de forma íntegra a la fundación de la que es fundador y patrono.

El pistoletazo de salida oficial de esta vuelta al mundo filantrópica tuvo lugar el pasado 21 de abril. En todo este tiempo, Cayetano ha recorrido los cinco continentes nutriéndose de experiencias únicas. Rivera puso en marcha este proyecto con dos finalidades: dar visibilidad y concienciar sobre la importancia que tienen los proyectos de ayuda a la infancia y conseguir fondos para financiar proyectos de otras organizaciones benéficas ya establecidas. Los proyectos a los que apoyan estarán siempre dentro del marco de la infancia: nutrición, educación, salud o formación. También programas contra la marginalidad, contra la explotación infantil, campañas de ayuda a los niños refugiados o recuperación social en casos de abusos infantiles. Yo Niño colabora con aquellas ONG que con su esfuerzo y dedicación logran mejorar la vida de los niños que padecen alrededor del mundo.

Cayetano, con las pilas cargadas, regresa a punto para celebrar la boda religiosa de su hermano mayor, Francisco, con Lourdes Montes que tendrá lugar mañana en Sevilla. Un reencuentro muy esperado con los suyos, a los que seguro tendrá que contarles muchas vivencias inolvidables.