Este domingo termina el estado de alarma y a pesar de paulatina mejora de los datos sanitarios, el avance de las vacunas y el tímido repunte de la actividad económica, todavía quedan muchos frentes abiertos por atender en la Concejalía de Asuntos Sociales.

La titular de la Concejalía, Carmen Lara, hace balance de la gestión de este último año, la etapa más dura para estar al frente de los servicios sociales de un Ayuntamiento.En declaraciones a Diario de Cádiz la concejala asegura que a pesar de que lo peor ya ha pasado “no bajamos la guardia” y recuerda los peores días de la pandemia, durante el confinamiento, con jornadas maratonianas y una Concejalía que tuvo que ser reforzada y que ha mantenido durante la mayoría de este tiempo la atención presencial.

Lara recuerda cómo en esas fechas tan tristes lo que más le impresionó fue tener que atender a personas que jamás habían necesitado de los servicios sociales, familias que se vieron obligadas a recurrir al Ayuntamiento para poner un plato de comida en su mesa. “Ha sido un año muy amargo”, asegura la edil.

En cuanto al balance propiamente dicho, Lara explica que desde el inicio de la pandemia se han entregado ayudas de emergencia por un importe de 188.490 euros destinadas a atender a 951 familias, para la compra de alimentos y productos de primera necesidad. Igualmente se han concedido 493 ayudas económicas familiares de la Junta de Andalucía por un valor total de 134.321 euros repartidos entre 170 unidades familiares.

Otros 418.883 euros se han destinado a ayudas económicas municipales de emergencia, distribuidas entre un millar de familias de El Puerto, con la tramitación de 6.799 expedientes.

Un total de 60.000 euros han llegado a través de los vales de supermercado a 1.059 unidades familiares, para la adquisición de alimentos y productos de primera necesidad y se han entregado 1.973 ayudas en concepto de suministros básicos y alquiler por un importe de 130.317 euros, que han llegado a 1.033 unidades familiares. Igualmente se han tramitado 281 expedientes de Renta Mínima de Inserción, con carácter extraordinario y urgente Covid-19.

Una de las colas ante la sede de Cruz Roja durante el pasado año.

A estas cifras hay que sumar los 110 menores derivados a comedores escolares del programa SYGA a través de la Delegación de Educación por la ampliación del programa de refuerzo de comedores escolares de los Centros de Enseñanza Pública, 235 derivaciones a campañas de alimentos ofrecidas por entidades privadas como el proyecto equipo de Ángel León y Lu con ayuda de la Fundación World Central Kitchen y suministro de Makro España, las derivaciones a programas de alimentos de las distintas ONGs como Cruz Roja, Sol y Vida o Adra, entre otras, y las derivaciones del Programa de Tarjetas Monedero durante la primera fase a 331 familias, de las que han sido entregadas 279 hasta el 31 de enero de este año a través de la Cruz Roja, siendo la segunda población en número de derivaciones desde los Servicios Sociales de la provincia.

Se han repartido en colaboración con Sol y Vida hasta la fecha 20.610 comidas diarias. Se han entregado además, en colaboración con el Banco de Alimentos, 18.000 kilos de alimentos, con una media de entrega de 160 bolsas mensuales y toneladas de alimentos donados por empresas como Mercadona o recogidas en la Base Naval de Rota, que también han sido distribuidas a las familias portuenses que más lo necesitaban con la colaboración de Protección Civil..

Además se han distribuido más de 450 kits de material escolar donados por la Fundación La Caixa y CaixaBank, para los menores en situación de riesgo. Los trabajadores de Servicios Sociales también se encargaron de la valoración de todos los expedientes de las familias que solicitaron instalación de wifi gratuito. Más de 200 familias pudieron contar con este recurso gracias a una empresa portuense que prestó todo su inventario con el fin de ayudar en la situación de emergencia, priorizando los hogares con estudiantes a su cargo, entre los que también se repartieron unos 25 dispositivos entre ordenadores portátiles, de sobremesa y tablets.

También recuerda Carmen Lara la apertura exprés del centro de emergencia social para atender a los sintecho durante el confinamiento, en un edificio anexo al centro de Anydes en el que ahora se hace el reparto de comida en bolsas.

Todo ello, según recuerda Lara, junto al resto de las labores habituales de la Concejalía, como el programa de Ley de Dependencia, las 111 familias con las que se trabaja a través del Equipo de Menores dentro del Programa de Tratamiento Familiar y de Infancia Familias, los 528 pacientes del Centro Municipal de Toxicomanías -con un aumento de pacientes con demanda de tratamiento por juego patológico, adicciones sin sustancias y cannabis- o las 1.475 consultas atendidas en el Centro Municipal Asesor de la Mujer.

También cita Lara el desarrollo del taller de Memoria, con 72 plazas, todas cubiertas, en el centro de Los Frailes, el programa ERACIS, con un taller de orientación formativo laboral en el centro cívico, un taller de acompañamiento de búsqueda de empleo y paseos saludables y talleres para reanudar los estudios y de alfabetización.