El alcalde de Cádiz, Manuel de la Pinta, publicó ayer un bando sobre el funcionamiento de los ultramarinos y establecimientos generales.

Todos los ultramarinos de nuestra ciudad deberán estar instalados en lugares de amplia ventilación y luz natural. El pavimento, obligatoriamente, será de mármol blanco o de losetas de tonos claros. Las paredes deberán estar alicatadas hasta los dos metros de altura y los mostradores tendrán que ser de madera fina y cubiertos con una tapa de cristal o mármol.

Los ultramarinos podrán contar con un espacio para la venta de vino y bebidas, pero contando con un tabique de separación con hueco de paso.

El personal que trabaje en los ultramarinos deberá ir vestido con bata o blusón. El papel para envolver las mercancías será siempre nuevo, los cuchillos limpios y la tabla para seccionar el jamón será siempre de madera especialmente dura.