El Gobierno dio hoy luz verde a una de las medidas 'estrella' de la campaña electoral del PSOE: la deducción de 400 euros de las retenciones del Impuesto de las Rentas de las Personas Físicas (IRPF). La rebaja, que se llevará a cabo gracias a que el Consejo de Ministros aprobó hoy un Real Decreto que modifica el Reglamento existente, se aplicará en un 50 por ciento en la nómina de junio y  el resto se completará de forma proporcional hasta diciembre. Después de que el vicepresidente económico, Pedro Solbes, advirtiera de que dicha deducción agota el margen de maniobra con el que cuenta el Ejecutivo para adoptar medidas discrecionales contra el frenazo de la economía, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega quiso dejar claro hoy que, en cualquier caso, el Gabinete cumplirá con todos sus compromisos de la campaña.

Los asalariados, los pensionistas y los trabajadores que perciban rendimientos procedentes de actividades económicas que presenten pagos fraccionados, serán los principales beneficiarios de la nueva deducción de 400 euros en el IRPF, una de las principales promesas económicas de los socialistas durante la pasada campaña electoral, y que según Solbes podría ahora ahogar a la economía española que se quedará sin recursos para poner en marcha nuevas medidas discrecionales.

Dicha rebaja, que comenzará a hacerse efectiva el próximo 1 de junio, se aplicará a través de una reducción de las retenciones mensuales, por lo que en la nómina de ese mes los contribuyentes percibirán un total de 200 euros más, ya que se trata de la cuantía correspondiente a los seis primeros meses del año. Así, la cantidad restante prevista en la deducción se minorará cada mes de las retenciones que se practiquen hasta diciembre, aunque a partir del año que viene, los contribuyentes recibirán los 400 euros mediante una reducción en doceavas partes.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, De la Vega aseguró que la aprobación de la medida demuestra el compromiso expresado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante la campaña electoral y destacó que se trata de una iniciativa que estimulará las economías de las familias y el ritmo y la vitalidad del crecimiento económico. La vicepresidenta aseguró que "6.000 millones de euros de rebaja fiscal", el coste de la deducción, "supondrán un gran impacto para la economía y para las familias".

La 'número dos' del Ejecutivo quiso, no obstante, aclarar lo que ayer aseguró Solbes acerca de los recursos disponibles para paliar la crisis económica, lo que preocupó a los principales agentes económicos españoles. De la Vega señaló que lo que quiso decir el ministro fue que el Gobierno no se puede permitir nuevas medidas discrecionales, pero que cumplirá con todos sus compromisos con los ciudadanos.

"Solbes no ha dicho que no vayamos a cumplir las previsiones, sino que no nos podemos permitir otras medidas discrecionales que no están previstas, y lo ha dicho con el buen criterio de control del gasto público y con el realismo que siempre practica con gran solvencia y rigor", apuntó.