La panadería y pastelería chiclanera La Cremita ha sido recientemente premiada con la Miga de Oro a la mejor panadería de Andalucía, una distinción que concede Panatics, entidad que defiende el pan artesano y que goza de bastante prestigio en el sector. El galardón se entregó el pasado 28 de septiembre en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) tras competir entre 45 finalistas de toda Andalucía.

El gerente del negocio, Daniel Ramos, ha sido hoy recibido por el alcalde de la localidad, José María Román, quien ha destacado que "estamos hablando de un proyecto pionero que, levantándose a las cuatro de la mañana, hace lo mejor y de ahí todos los reconocimientos y valoraciones positivas que tiene".

Este prestigioso galardón a la panadería chiclanera se une a otros importantes hitos conseguidos por Daniel Ramos al frente de La Cremita como el Premio Cádiz Joven 2018 en el capítulo de Economía y Empleo, otorgado por la Dirección Provincial del Instituto Andaluz de la Juventud, o la distinción Estrella Dir-Informática 2019 en la tercera edición de la Ruta Española del Buen Pan. Asimismo, Ramos estuvo presente en la final del Desafío Pan Ibérico Carrasco al mejor pan que realce los matices del jamón ibérico, que se llevó a cabo en 2019 en Madrid Fusión.

El alcalde ha indicado durante la recepción que "tras comenzar a trabajar en la hostelería, Daniel puso en marcha su propio negocio y actualmente cuenta con 27 trabajadores y un éxito increíble gracias a su apuesta por producir pan de calidad, donde la levadura fermenta donde debe hacerlo, que es en la panadería". Román ha recordado que "estamos hablando de un pan que tiene más de una veintena de chefs de toda la provincia. Si algo distingue a La Cremita es precisamente ese sello de calidad en sus productos, que son utilizados por restaurantes y chefs como Ángel León".

Por su parte, Daniel Ramos ha destacado que "es un gran orgullo crear una gran familia como la que estamos formando, porque son muchos padres y madres los que trabajan día a día con nosotros y que creen en nuestro proyecto. Lo que yo intento hacer es darle lo mejor a mis clientes y, a día de hoy, esa línea de trabajo está dando sus frutos".

Desde sus inicios en La Cremita, Daniel Ramos tuvo como objetivo recuperar la tradición panadera, desde la molienda de la harina hasta la cocción del pan, haciendo uso de un horno de leña. En este sentido, en La Cremita tienen una filosofía de elaboración afrancesada, donde las fermentaciones son largas y a bajas temperaturas y las cocciones en leña a altas temperaturas. Su afán, en definitiva, es acercar a los chiclaneros y visitantes ese pan que ya no existe y que tanto ama.