"El debut perfecto hubiera sido conseguir la victoria"

La noticia positiva de la jornada para el Cádiz -la única, quizá- fue el estreno liguero de un canterano. Rubén Díaz juega cada jornada con el filial en Tercera División con la ilusión de poder dar el salto algún día al primer equipo. No podía imaginar una semana antes que en el siguiente partido ocuparía una plaza en el centro de la defensa del Cádiz. Un sueño hecho realidad de golpe y porrazo a sus 21 años, aunque una felicidad a medias porque el equipo amarillo no logró una victoria que era necesaria para conservar la cuarta plaza. "Estoy contento por haber debutado, por las felicitaciones de mi familia, mis amigos, mis compañeros..., pero se me ha quedado el mal sabor de boca de no haber ganado el partido. El debut perfecto hubiera sido con un triunfo".

Rubén Díaz cumple su cuarta temporada en el club. Ha pasado por el juvenil y el Balón antes de llegar al Cádiz B y de hacer realidad su sueño de toda la vida. "Jugar con el primer equipo ha sido la mayor alegría de mi vida, fue el día más feliz del mundo salvo la mancha del resultado negativo". El central confesaba que el sábado -cuando Jose González le anuncio que iba a ser titular al día siguiente-, "se me hizo el día muy largo y me encontraba agarrotado".

Los nervios de las horas precedentes desaparecieron el domingo. "Todo el vestuario me dio su apoyo y cuando salí a calentar se me quitó todo y estuve muy tranquilo".

Un día después de su debut en Liga, el central se mostraba "satisfecho con lo que hice. No me compliqué la vida en la salida del balón, hice lo que sabía y hubiera estado más contento si hubiésemos ganado".

El joven de Paterna ya participó con el primer equipo en el Trofeo Carranza y en la Copa del Rey, aunque el estreno de verdad, en el que el equipo se jugaba la vida, fue el domingo contra el Lucena. "Hace una semana no me podía imaginar que iba a entrar en la lista del primer equipo y que además iba a salir en el once titular".

"Uno siempre trabaja para que algún día llegue una oportunidad y es importante estrenarse con el Cádiz". El canterano vive con ilusión su entrada en el primer equipo consciente de su eventualidad porque "pertenezco al filial". Su moral está por las nubes, aunque lejos de creérselo, "ahora voy a pelear más todavía, al 200%, porque todo lo que he conseguido ha sido siempre a base de trabajo".

El hecho de que un jugador del filial juegue con el primer equipo supone un acicate para los canteranos. "Este año parece que se cuenta con la cantera. El míster ha sido valiente al darme toda su confianza y tanto mis compañeros del B como yo vemos que es posible".

El zaguero termina contrato en junio y espera una llamada del club. "De momento no me han dicho nada, pero mi intención es quedarme aquí, me siento identificado con los colores y el escudo del Cádiz y tengo toda la ilusión del mundo por renovar e intentar dar el salto al primer equipo". El canterano cree estar preparado para jugar en el Cádiz. "Yo me veo capacitado, pero no soy quien decide".

Rubén Díaz cree en el ascenso. "Hay plantilla y calidad, el equipo va a remar en las siete finales que restan para entrar en la siguiente fase y después va a lograr el ascenso". Así sea.