El Cádiz CF se presenta el lunes 4 de diciembre (a partir de las nueve de la noche) en el estadio de Balaídos para disputar un importante partido contra el Celta de Vigo que cierra la 15ª jornada de Liga antes de afrontar el jueves el compromiso de la segunda Copa del Rey ante el Arandina.

El encuentro levanta expectación porque se ven las caras dos rivales directos en la compleja pugna por la permanencia en Primera División. El cuadro local parte desde la zona de descenso a la que corre peligro de caer en el Cádiz CF si sufre una derrota que le complicaría la vida. Los de Sergi González van con la idea de sumar puntos.

El envite entre vigueses y gaditanos adquiere un sabor especial para los dos futbolistas uruguayos que militan en el Cádiz CF, sobre todo para uno.

Maxi Gómez se dio a conocer muy joven en el fútbol español cuando fichó por el Celta con sólo 21 años en la temporada 2017-18 procedente del Defensor de su país de nacimiento.

El ariete marcó 30 goles en el global de sus dos campañas como celeste (17 en la primera y 13 en la segunda) y el Valencia lo compró por 14,5 millones de euros (el triple de lo que le había costado al club gallego). Su paso por el conjunto che no fue tan productivo (22 tantos en el balance de tres cursos) y fue traspasado al Trabzonspor (Turquía), con el que hizo media docena de dianas en 31 partidos el pasado ejercicio 2022-23 antes de ser cedido al Cádiz CF.

Maxi Gómez aún no ha estrenado su cuenta anotadora con los amarillos y quizás tenga la oportunidad de hacerlo en el regreso a la que fue su casa, donde recorrió su mejor periodo desde que cruzó el charco.

Para Brian Ocampo también especial el encuentro porque su estreno oficial en el Cádiz CF fue precisamente en el choque frente al Celta de la pasada temporada disputado en Balaídos. No fue el mejor debut porque los amarillos perdieron con claridad (3-0). El extremo vuelve un año después con la intención de obtener un resultado distinto que sirva para mantener al equipo fuera de la zona de descenso. Una vez recuperado de una grave lesión, lo normal es que siga teniendo minutos en la segunda mitad como en los dos duelos anteriores desde su reaparición.