El Elche, penúltimo clasificado, apura sus opciones de permanencia en el Ramón de Carranza. El equipo de Vicente Parras, que acumula siete partidos sin sumar el triunfo, no tiene más remedio que ganar al conjunto amarillo para evitar el descenso y llegar con vida a la última jornada del campeonato.

La situación es límite para el Elche, que podría descender matemáticamente al final de la jornada en el caso de que el Nástic de Tarragona, situado a tres puntos de distancia, superara en Tenerife el resultado del equipo ilicitano en la Tacita de Plata.

El Elche, tras la leve mejoría apuntada ante el Reus, confía en romper su mala dinámica en una jornada que si le es propicia en cuanto al resto de los resultados puede incluso dejarle fuera de los puestos de descenso.

Parras recupera para este partido a Sergio Pelegrín, baja la pasada jornada por tarjetas, al delantero Guillermo Fernández, quien regresa al equipo dos jornadas después tras sufrir una lesión muscular, y al central Armando Lozano, baja ante el Reus por problemas físicos.

El ex cadista Josete, titular desde la llegada de Parras al banquillo, se une a la lista de bajas por una lesión muscular. Tampoco estarán en condiciones de jugar Pedro Sánchez, Dorca, Edu Albacar, Matilla y Hugo Fraile, todos ellos con problemas físicos, además de Mandi, sin ficha.

El técnico del Elche, Vicente Parras, que ha convocado a los 20 jugadores disponibles, no ha dado pistas sobre la alineación, aunque parece segura la presencia de Pelegrín en el eje de la defensa y de Pelayo en la media punta por detrás de Nino.

El conjunto ilicitano contará en las gradas del Carranza con el respaldo de medio millar de seguidores que se han desplazado a Cádiz en nueve autocares que ha puesto el club en busca de un triunfo que evite el descenso matemático a Segunda B 19 años después.