El Cádiz CF tiene muchos problemas que están provocado que su rendimiento no sea el esperado en el presente curso, de ahí a la mala dinámica y a la preocupante clasificación a las puertas de la zona de descenso a Segunda B. Son varias las causas que están afectando al colectivo, si bien algunas tienen nombre propio, como es el caso de Salvi Sánchez. Su aportación está resultando muy pobre y el equipo lo está acusando. Lejos de esa velocidad con desborde, llegada e incluso gol, el futbolista sanluqueño sigue sin despertar a pesar de que los compañeros le esperan para salir de atolladero actual. Salvi es una crisis dentro de la gran crisis del Cádiz CF.

El extremo cumple su cuarta campaña en el conjunto amarillo, al que llegó procedente del Atlético Sanluqueño con la fortuna y el acierto de dar el salto de categoría con el equipo de la capital de su provincia natal en su primer año en el Carranza. Los arranques de temporada del futbolista han guardado en este tiempo cierta similitud, pero nunca antes el jugador había sido tan pocas veces titular como en el presente curso después de siete jornadas de Liga y las rondas iniciales de la Copa del Rey. Esta campaña ha participado hasta el momento en ocho partidos (cinco como titular), con 464 minutos en sus piernas y sin estrenar la faceta goleadora. Lejos de lo que cabe esperar de él.

La temporada pasada a esta misma altura sumaba casi 200 minutos más y dos titularidades más. Una cifra discreta la firmó en su estreno como cadista, en la 2015-16, con siete partidos y cinco titularidades en el primer mes y medio de competición; eso sí, anotó dos goles.

Los cantos de sirena del pasado verano parece que, de una manera u otra, han ido afectando a Salvi por aquello de la posibilidad de que acabara siendo traspasado, como sucedió con Álvaro García, su amigo y ahora ex compañero de vestuario. A esto hay que unir una pretemporada difícil en la que le costó estar en el tono adecuado para que ahora despertara lo mejor de su repertorio.

El Cádiz CF necesita que mejoren muchas cosas aunque una de las más importantes sería que Salvi saliera al rescate de los amarillos como tantas veces hizo como una 'bala' por la banda derecha. El arma de la que Álvaro Cervera ha presumido en los extremos está hasta el momento liderada por una buena versión de Manu Vallejo, si bien no es suficiente que el canterano se esté echando el equipo a la espalda. Salvi, su mejor cara, debe volver y el cadismo le está esperando.