La parte más amarga del fútbol golpea al Cádiz CF y lo hace contra uno de los jugadores más queridos, Jon Ander Garrido. Uno de los veteranos de la plantilla vuelve a chocar de frente con sus problemas físicos, que le vienen acompañando con demasiada frecuencia en los últimos tiempos. El vasco ya conoce su parte médico y que, para su desgracia, tendrá que ser intervenido.

Desde el departamento médico del Cádiz CF se ha anunciado lo siguiente: "Jon Ander Garrido será baja al menos los próximos cuatro meses. El capitán cadista sufre una tendinosis crónica que le va a obligar a pasar por el quirófano". El centrocampista se someterá en los próximos días a una cirugía de raspado del tendón rotuliano, que le obligará a un trabajo alternativo de recuperación que le impedirá estar disponible en el presente 2021.

Desde que arrancó la pretemporada eran muchas las incógnitas que circulaban alrededor de Garrido en cuanto a su lugar en el proyecto y, sobre todo, su estado físico para un Cádiz CF de la exigencia del de Cervera. No muy lejos en el tiempo queda esa aportación fundamental del centrocampista, especialmente en Segunda A, que prácticamente ha existido a cuentagotas en Primera.

La segunda temporada en la elite ha traído de la mano una apuesta por reforzar la posición del bilbaíno. El chileno Tomás Alarcón ha sido uno de los elegidos; un internacional con experiencia en competiciones internacionales como la Copa América. A este futbolista le ha seguido Martín Calderón, un jerezano exquisito con el balón que en Burnley dio muestras de lo que es capaz de hacer. A esta lista hay que unir a Jens Jonsson, José Mari e incluso Álex Fernández, por lo que la competencia es de tal nivel que, sin estar lesionado, Garrido tenía por delante un panorama oscuro.

Con el parte de su lesión y con contrato hasta el 30 de junio de 2023, el pivote bilbaíno debe pensar primeros en esos cuatro meses hasta su recuperación para estar apto tras ese periodo. Hasta entonces debe armarse de paciencia porque no debe ser fácil después de ir acumulando tantos contratiempos que le han obligado a estar en la enfermería más de lo deseado.

Sin ir más lejos, el ex del Barakaldo no ha podido participar en los partidos de la pretemporada como consecuencia de esas molestias que le impedieron entrenarse con normalidad en los compases iniciales del periodo de preparación.

La lógica apuntaba a una posible marcha del vasco, que tenía todas las papeletas para salir cedido a un conjunto de la categoría de plata. Es el primer capitán, un jugador muy querido dentro y fuera del vestuario, con un comportamiento impecable, siempre comprometido con la causa cadista. Salvi y él son los únicos que quedan de los que llevaron el escudo cadista en Segunda B, en Segunda A y en Primera.

Es un futbolista especial que acumula nada menos que ocho temporadas en el Cádiz CF (llegó en enero de 2014), aunque por el momento no podrá empezar la que esa su novena campaña, todo un récord en estos tiempos.

Todo hace pensar que Garrido se quedará sin dorsal a la espera de la apertura de la segunda ventana de incorporaciones (mercado invernal), cuando entonces se puedan despejar las incógnitas sobre el estado físico del futbolista y su futuro en la temporada 2021-22 dentro o fuera del Cádiz CF.