El Levante, recién descendido a Segunda División, tiene catorce días por delante hasta el 30 de junio para vender futbolistas por un valor de 10,5 millones de euros y, de este modo, cuadrar el presupuesto del ejercicio 2021-22.

El consejo de administración del Levante presentó ante sus accionistas en diciembre de 2021 un presupuesto que arrojaba un superávit para la temporada 2021-22 de 89.000 euros y para cumplirlo deberá vender por algo más de diez millones de euros.

Si el presidente del Levante, Quico Catalán, no consigue alcanzar esta cifra en estas dos últimas semanas de junio, volvería a presentar pérdidas después de haber presentado 23,2 millones de euros de déficit en el curso 2020-21.

Hasta la fecha, el Levante únicamente ha confirmado haber recibido ofertas por el extremo segoviano Jorge De Frutos, que acabó lesionado la temporada, y por el centrocampista macedonio Enis Bardhi.

Sin embargo, y según explicó esta misma semana el director deportivo del club, Felipe Miñambres, la oferta recibida por De Frutos, que sería del Getafe, es “insuficiente”. Además, el cincuenta por ciento de los derechos económicos del jugador pertenecen al Real Madrid.

Mientras, Bardhi rechazó la propuesta recibida por el Levante de un equipo de la MLS de Estados Unidos, aunque la intención tanto del jugador balcánico como la del club valenciano es que el futbolista abandone el Levante este verano.

Además de la salida de José Luis Morales, el Levante también está a la espera de movimientos a corto plazo con el meta Aitor Fernández, que pese a que tiene contrato también podría abandonar el club.