El Cádiz se enfrenta a dos expedientes que se saldarán muy posiblemente con sendas multas por unos hechos sucedidos en dos encuentros de Liga disputados en el Ramón de Carranza y que han sido denunciados por LaLiga ante el Comité de Competición y la Comisión Antiviolencia. Se trata del lanzamiento de una botella al terreno de juego el día del partido contra el Extremadura y de los insultos que recibió el portero del Girona en el encuentro contra este equipo.

La Liga Nacional de Fútbol Profesional remite cada semana un escrito de denuncia al Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y a la Comisión Antiviolencia, en el que se reflejan aquellos cánticos que se producen en los encuentros de fútbol que inciten a la violencia o tengan un contenido insultante o intolerante. Estos cánticos aparecen recogidos como comportamientos prohibidos y, por tanto, son sancionables tanto en el Código de Disciplina Deportiva de la RFEF como en la Legislación contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.

Según recoge LaLiga, una de las denuncias afecta al partido disputado entre el Cádiz y el Girona, en el estadio Carranza, correspondiente a la jornada quinta de LaLiga SmartBank (Segunda División A). "En los minutos 70, 74, 76, 80, 83 y 85 de partido, y justo en el momento que el portero visitante iba a golpear el balón, unos 1.000 aficionados locales, ubicados en la grada baja del Fondo Sur del estadio, entonaron una sola vez en cada ocasión, de manera coral y coordinada "eeehhh cabrón", siendo secundado por otros aficionados locales presentes en el estadio desde otros graderíos". De esta manera expone este organismo lo sucedido en el duelo contra el conjunto catalán.

Del mismo modo, la segunda denuncia afecta al Cádiz-Extremadura, correspondiente a la tercera jornada. "En el minuto 90+2 de partido, según cronómetro visible en las imágenes del vídeo que se adjunta, desde una de las gradas donde se ubica la afición local, se ha lanzado una botella de plástico sobre el terreno de juego, sin impactar en ningún jugador. Dejar constancia que a pesar de que en las imágenes un jugador del equipo visitante se lanza al suelo, revisadas las imágenes parece apreciarse claramente que la botella no impacta sobre ningún jugador. El árbitro del partido, Aitor Gorostegui Fernández, recoge este lanzamiento en el acta arbitral", lo que no sucedió con el colegiado del Cádiz-Girona en cuanto a los insultos al portero del equipo catalán.

A pesar de estas denuncias por los hechos anteriormente relatados, desde LaLiga se añade que la afición del Cádiz tuvo un comportamiento adecuado, por lo que se señala a estos incidentes como episodios aislados que, no obstante, pueden dar paso a una multa económica para el club que preside Manuel Vizcaíno.