El Cádiz no se encuentra de vacaciones en Benalup, ni mucho menos. Por más que el idílico entorno del Hotel FairPlay Golf & Resort de la localidad jandeña, escenario elegido para el stage de pretemporada, invite a la relajación y a pesar que los integrantes de la primera plantilla tampoco lo están pasando tan mal, al fin y al cabo, lo cierto es que las imágenes de las sesiones preparatorias hablan por sí solas.

Las necesidades mandan y a fe que el preparador físico del equipo amarillo, Miguel Ángel Campos, parece decidido a cumplir las consignas marcadas por Álvaro Cervera, que quiere a los suyos en el mejor estado de forma posible para el arranque de la competición pero a buen seguro también pretende evitar picos durante el curso que favorezcan las malas rachas.

El entrenador supervisa cada sesión convencido de que el sufrimiento presente tendrá su recompensa en el futuro. A los futbolistas no les queda otra que sudar la gota gorda, acabar algunos días incluso extenuados. En tal circunstancia, el paraíso les parecerá con toda certeza un infierno.