El entusiasmo que se despierta en Caballeros Hospitalarios por la pronta apertura en su albergue del área para mujeres sin hogar se ha visto ensombrecida por un incidente en la zona masculina. Y es que el techo de los cuartos de baño se ha hundido debido a unas filtraciones de agua.

“Ocurrió estando yo aquí una mañana y aunque, afortunadamente, no hemos tenido que lamentar ninguna pérdida que no sea material, la verdad es que fue un susto porque toda esa parte del techo se vino abajo”, explica el presidente de la institución, José María Gómez, mientras señala el espacio, bastante amplio, afectado.

Lo que han podido hacer desde Caballeros Hospitalarios es “retirar todos los escombros” para poder seguir usando algunos de los aseos y duchas. “Pero la verdad es que esto necesita ser reparado, no lo podemos dejar así”, acierta.

De todas formas, a la institución de beneficencia gaditana le gustaría hacer de esta lamentable circunstancia, fortaleza y aprovechar para sacar adelante un proyecto de rehabilitación de los aseos “para poder adecuarlos también a las personas con movilidad reducida”. Por ello, Caballeros Hospitalarios, que cuenta de nuevo con un proyecto redactado por el arquitecto Víctor Gómez, quisiera presentar la idea a alguna institución pública para conseguir su colaboración y poderlo llevar a cabo.

Una de las habitaciones del albergue para hombres de Caballeros Hospitalarios.

Los aseos son una parte esencial de un equipamiento que durante este mes de agosto, y como una anomalía a la que los miembros de la junta no saben responder, ha recibido en el mes de agosto “más de 800 pernoctaciones”. “Es una cifra altísima para ese mes, porque con el buen tiempo descienden mucho los usuarios. Sin embargo, lo de esta agosto ha sido muy raro”, explican los caballeros hospitalarios que actualmente cuentan con 19 de sus 21 plazas ocupadas. “Hasta hace poco, en septiembre, sólo teníamos 9 pero ya ha empezado a crecer y, cuando empiecen las condiciones climatológicas adversas, tenemos hasta lista de espera”, asevera el presidente.

Además del albergue, Caballeros Hospitalarios hacen donaciones de ropa regulares (de particulares y miembros de la instituciones) a Cáritas y Madre Coraje; son punto de recogida del Banco de Alimentos –“aunque hasta diciembre no vamos a poder hacer reparto porque no nos llegan alimentos desde la central”–; han colaborado con los Sagrados Corazones donándoles material sanitario y ropa deportiva en los envíos de la orden a Mozambique, Somalia, Mali e Indonesia; además de facilitar a sus usuarios que se van de temporeros “los billetes de tren para donde vayan a trabajar”.