La empresa de limpieza de Cádiz, en el punto de mira
El Ayuntamiento ya no esconde su descontento con Valoriza, responsable de la limpieza viaria de la ciudad, ante el continuado mal estado de las calles
Cádiz tiene un evidente problema con la limpieza. El estado de la ciudad no es, ni mucho menos, óptimo. Lo sabe el gaditano, que cada vez protesta más de esta situación, y también lo saben en el propio Ayuntamiento, donde ya no niegan la mayor ni disimulan la deficiencia, como tampoco esconden el malestar que existe con la empresa responsable del servicio, Valoriza, que está en el punto de mira del equipo de gobierno por el generalizado descontento en lo que a limpieza se refiere más de año y medio después de que comenzara a ejecutar el contrato.
El principal problema de la situación de la limpieza radica en el propio pliego de condiciones que se elaboró en su momento, unido al nefasto proceso de licitación que siguió el Ayuntamiento entre 2019 y 2022. Tres años para licitar un contrato que fue adjudicado a las tres empresas que se presentaron, quedando al final en manos de la peor clasificada. El actual responsable del área de Medio Ambiente, José Carlos Teruel, lo expuso abiertamente en el último pleno municipal, hace tan solo unos días. “La peor oferta, más cara y peor valorada fue la adjudicataria”, resumía presentando este escenario “que parece una broma pero no lo es”; una oferta que viene a ser “10 millones más cara que las otras” y cuya puntuación fue “un 30% inferior que las otras”.
“Estamos pagando caro el pliego por el desastroso proceso de adjudicación”, siguió denunciando Teruel, que recordó cómo desde el 31 de julio 2016 “que debía haber sido el último día de trabajo de Sufi Cointer” hasta septiembre de 2022 estuvo la anterior empresa funcionando “a base de prórrogas”. Y al hilo de esto, recordó también como esa UTE que formaban Cointer y Valoriza reclaman ahora 7,5 millones de euros al Ayuntamiento a través de un proceso que está en un Contencioso.
“El principal problema del contrato de limpieza fue la nefasta adjudicación”, concluía Teruel en ese pleno del 26 de septiembre. A ello se une también el pliego de condiciones en sí, que no era ambicioso y que contiene lagunas o deficiencias que suponen un lastre importante en la ejecución diaria del servicio. La más grave fue la ausencia de referencia alguna a la quinta fracción que Cádiz tiene que implantar; tendría que haber implantado, de hecho, hace ya un tiempo, siguiendo con la normativa y el cronograma fijado por Europa.
Esta laguna obligará ahora a invertir más dinero en el servicio para incorporar esa recogida de los nuevos contenedores (de color marrón), que necesitarán más camiones, más trabajadores y más horas de contrato. Una necesidad que tiene un problema añadido, según trasladó Teruel en ese pleno: la implantación de la quinta sección copará esa posibilidad de subir hasta un 20% el actual contrato, lo que impedirá realizar otras mejoras en el servicio que se consideran necesarias para un buen estado de revista de la ciudad.
Tampoco contempla el pliego, en palabras del concejal, “el repaso que la ciudad necesita”. Y esto choca frontalmente con la impresión que en el gobierno municipal existe en relación a la limpieza; y esa es que la ciudad amanece con un estado óptimo de limpieza, que va deteriorándose conforme avanza la mañana sin que la empresa ponga solución. Es decir, que falta personal y maquinaria para mantener el buen estado de revista que presenta Cádiz a primera hora de la mañana.
Esta es, precisamente, una de las peleas que el Ayuntamiento mantiene con Valoriza, en esa constante labor de coordinación y de análisis del servicio que mantienen las partes y en las que se viene constatando ese malestar cada vez más visible por la deficiente limpieza de la ciudad. Y es que a ese problema del pliego, y de la adjudicación, entiende el actual gobierno que se une también una falta de cumplimiento del 100% de las condiciones.
El trabajo para revertir la situación
Ante todo ello, desde el Consistorio se viene peleando en diferentes soluciones. Una de ellas es la de mejorar la inspección del servicio, muy deficitaria porque de los 5 inspectores que establece el pliego solo había uno en servicio; recientemente ha incorporado el Ayuntamiento otros dos, por medio de una bolsa que ha vuelto a ser activada para permitir a funcionarios de otras delegaciones pasar a esta función de inspección del contrato de limpieza viaria.
También ha pedido el Ayuntamiento que la empresa reorganice los turnos y la disponibilidad de la maquinaria, buscando ese refuerzo en el repaso y mantenimiento de las zonas que más se deterioran conforme avanza la mañana y la tarde. Una medida que busca evitar la situación actual (que se baldea durante la madrugada, y luego ya no se actúa hasta la madrugada siguiente). Junto a ello, hay también una preocupación por el modo de baldear y la necesidad de emplear agua a presión; y jabón, tan ausente estos últimos años en las calles de Cádiz.
Otro problema que tiene el servicio es el relativo a la maquinaria y vehículos, que siguen sin ponerse en funcionamiento. De hecho, fuentes consultadas trasladan la fecha de llegada a Cádiz de estos camiones y máquinas de limpieza a febrero o marzo del próximo año; es decir, dos años después de haber comenzado la ejecución del contrato. Ante este escenario, el Ayuntamiento ya ha reclamado a la empresa que incorpore nueva maquinaria provisional a la espera que llegue la fijada en el contrato, ya sea utilizando vehículos que Valoriza tenga en otras ciudades, o bien recurriendo al alquiler de este tipo de elementos que se necesitan para la limpieza de la ciudad y de los que no se está disponiendo.
Primeras saciones
Al margen de todo esto, y en paralelo a ese trabajo que se viene haciendo con Valoriza, también ha iniciado el Ayuntamiento la senda de la sanción como camino para buscar el mejor estado de revista posible de la ciudad. En esta línea, avanzó el concejal en el último Pleno que se ha incoado expediente “por no tener operativas herramientas de control del servicio” que establece el pliego, tales como el GPS de los vehículos y otro sistema para certificar qué trabajo hace el personal en la calle.
“No nos temblará el pulso con la empresa a la hora de controlar la limpieza de la ciudad”, señaló José Carlos Teruel al respecto del servicio que está prestando Valoriza, que está en el punto de mira del Ayuntamiento.
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