En este juego desesperado de quién debe pagar ahora un equipamiento universitario, que siempre había estado en manos de la administración regional, el rector de la UCA, Francisco Piniella, está a punto de tirar la toalla en cuanto a la defensa del necesario traslado de la vieja Facultad de Ciencias de la Educación de Puerto Real, al edificio de Valcárcel.

Ya nadie espera que la Junta dé su brazo a torcer y meta en sus presupuestos para 2022 una partida para iniciar la financiación del nuevo centro, fijada por la UCA en 40 millones de euros. Francisco Piniella, en una conversación con Diario de Cádiz, deja claro que "si no aparece en estas cuentas, la operación es imposible".

"En el plan de infraestructuras de la UCA hasta 2023 hay una previsión de gastos en los centros universitarios del Campus de Cádiz 4,4 millones de euros. Esta cantidad es el 10% de lo que puede costar la obra en Valcárcel, por lo que para nosotros es inviable. Y por eso me fastidia que nos lancen siempre la pelota a nuestro tejado, ya que estamos hablando de magnitudes muy diferentes".

Considera viable que la Junta asuma el proyecto mediante fases, porque tiene claro que "si la obra da comienzo ya sigue adelante". ¿Idea? Pues que se pongan 8 millones de euros que es lo que, según la UCA, cuesta rehabilitar el edificio histórico. Y a partir ir metiendo en los presupuestos anuales nuevas partidas para concluir el proyecto.

Pero si la Junta rechaza esta posibilidad, Piniella cree que es lanzar un brindis al sol pretender que otras administraciones puedan a poner fondos para el proyecto. "¿Quién se cree que el Ayuntamiento vaya a poner dinero a este plan?", afirma.

Ante este panorama de absoluto inmovilismo, el rector pone una fecha: diciembre de 2022. Es entonces cuando acaba la concesión del edificio aprobada en su día por Diputación. Y aunque la institución provincial está dispuesta a prorrogarla, Francisco Piniella considera que es absurdo "mantener un proyecto que no va a tener dinero para su ejecución", por lo que en este momento planteará al Claustro de la UCA rechazar la continuidad de la cesión. "Hasta aquí hemos llegado", concluye.

Advierte el rector que la UCA no puede correr el riesgo de un accidente como el que pasó hace unos años en el Campo de las Balas. Si no se actúa ya en Valcárcel el edificio seguirá deteriorándose "y en las últimas semanas ya se han metido en su interior varias personas, provocando destrozos, con el riesgo que ello supone".

Es decir: queda un año para que se difumine de forma definitiva la vuelta a Cádiz de la Facultad de Ciencias de la Educación, y las 2.500 personas que mueve cada día. Será entonces cuando se comience a buscar una alternativa al actual y precario estado de este centro en Puerto Real. Pero la búsqueda no será en la capital sino en el mismo campus puertorrealeño.

"No sé si al final a la Junta se le iluminará algo y acabe poniendo el dinero. Pero es que tiene otro edificio en peor estado, el de Náutica, y no hace nada", por lo que es una esperanza cada vez más vaga.