Decía el arqueólogo municipal Pepe Gener parafraseando al arquitecto gaditano Javier Navascués que Cádiz es como una bolsa repleta de monedas de oro que se van perdiendo, una a una, por un agujerito. De no actuar, desaparecerá toda su riqueza.

Porque Cádiz no tiene un gran monumento. No presume de una Mezquita, ni de una Alhambra, pero atesora un gran casco histórico, colmado de rincones patrimoniales de gran valor. Su caserío, murallas, castillos, baluartes, torres miradores... Pasear por la ciudad es una delicia porque toda ella constituye un gran monumento en su conjunto. Pero hay que mantenerlo y recuperar el que se está deteriorando, o la bolsa de monedas perderá su valor.

Paco Cano en una de las mesas de trabajo del plan estratégico de Patrimonio

Y de esto trata el Plan Estratégico de Patrimonio Histórico Municipal que ha puesto en marcha la delegación de Patrimonio del Ayuntamiento de Cádiz y que esta semana se celebra en la Casa de Iberoamérica con la participación de expertos de todos los ámbitos y administraciones. Cuatro mesas de trabajo limitadas a doce personas relacionadas con la gestión patrimonial que tratará problemáticas del Patrimonio Histórico municipal desde cuatro enfoques: Patrimonio y responsabilidad institucional, Patrimonio y formación, Patrimonio y ciudadanía y Patrimonio y empresa.

En el primer encuentro, el que hablaba de la responsabilidad institucional y presentó el concejal Paco Cano, se abordaron numerosos puntos, pero hubo uno que obtuvo el consenso: la creación un Consorcio, una figura jurídica neutra que sea capaz de aglutinar a todas las instituciones públicas que tengan competencia en el patrimonio de Cádiz o bien que esté en su municipio. Estarían el Ayuntamiento, que debería liderar o impulsar esta iniciativa; Junta de Andalucía; la UCA; Diputación Provincial; Autoridad Portuaria; Obispado; Gobierno; Costas, Zona Franca, etc.; pequeñas y grandes empresas privadas de todos los sectores como podrían ser Navantia, Airbus etc.; fundaciones, así como la propia ciudadanía, a modo de mecenazgo. Todo esto ya se hace, y con mucho éxito, en ciudades como Málaga o Cartagena.

Esta figura podría gestionar todo el patrimonio, “porque quieras o no, para intervenir en el patrimonio municipal necesitas del regional, que te inyecten dinero, ideas o personal técnico. Un espacio neutro en el que todos se sientan representados pues, de lo contrario, será imposible, no funcionaría”, decía Darío Bernal, de la UCA, que formó parte de este primer encuentro de expertos junto a Juan Ignacio Vallejo, director del Museo de Cádiz; Tomás Carranza, del Colegio de Arquitectos; Paco Alarcón, director del Teatro Romano de Cádiz; Pepe Gener, arqueólogo municipal; Francisco Blanco, arqueólogo de Procasa; Amaya Pedrero de Diputación; Nuria Álvarez (PP) del Ayuntamiento de Cádiz; Antonio Sánchez Casas, arquitecto del Obispado; Juan Miguel Pajuelo, del Colegio de Arqueólogos y Virginia León, periodista de Diario de Cádiz, con la colaboración de María Dolores Goma y José Manuel López Eliso de CR9.

Ninguno de ellos dudó de la sinergia que a buen seguro generaría este Consorcio, “pues confluiría en el beneficio de la ciudad, más aún si la gente se siente partícipe y responsable de su patrimonio”, añadía Paco Alarcón.

Para ello es fundamental ver si hay voluntad real y, a partir de ahí, generar herramientas.

Entre las propuestas lanzadas se habló de la relevancia de evitar la pérdida y deterioro del patrimonio y conservarlo y ponerlo en valor según criterios realistas y pragmáticos, con planificación a corto, medio y largo plazo; tener una “visión en conjunto del patrimonio, de la arquitectura defensiva, el eclesiástico, el museístico, el flamenco...., una visión global de la ciudad como un ente con un rico patrimonio”, comentó Vallejo.

En este sentido es importante que Mantenimiento Urbano de Cádiz tenga más capacidad económica para mantener el suyo, dijo Gener. Es decir, un plan en el que esté incluido todo el patrimonio, independientemente de la administración que lo tutele, “porque el turista cuando viene no sabe de quién es”. Otra cuestión fundamental es evitar la gratuidad; la visibilización de todo este patrimonio muchas veces desconocido, y que podría hacerse desde una web que lo aglutine, a una buena señalética de la ciudad. “La que existe no es buena, a veces superpuesta, con distintos modelos y es interesante que sea homogénea para todo el patrimonio”, decía Alarcón.

Bernal también expuso que habría que buscar fórmulas que sean rentables y atractivas para el sector empresarial, “que conllevaría un acto de generosidad por parte de las instituciones”.

Charlas sobre patrimonio

Cada mesa de trabajo va precedida de una charla del ciclo sobre el estado del Patrimonio Histórico organizado por la Delegación de Patrimonio del Ayuntamiento de Cádiz. La primera y segunda que estuvo a cargo del arquitecto José Ignacio Fernández Pujol -el 12 y el 14-, abordaron la historia y el estado de las murallas. 

La siguiente cita que tiene lugar el 15 de diciembre corre a cargo del historiador y empresario Francisco Javier Ramírez, que revisará los modelos de gestión en espacios municipales. La última, el viernes 16 de diciembre, estará protagonizada por la decana del Colegio de Arquitectos, Isabel Suraña, cuya intervención versará sobre propuestas de reactivación de edificios abandonados.