A pesar de la dura crisis que está sufriendo el sector servicios en toda España y que está teniendo una importante incidencia en Cádiz, con la marcha de firmas relevantes especialmente en todo lo relacionado con la moda, aún se producen movimientos de cadenas interesadas en reforzar su presencia en diversas zonas del país, incluida nuestra ciudad, aprovechando para ello las ofertas que están ya en el mercado inmobiliario tras quedar muchos locales vacíos.

Un ejemplo es el cierre, hace apenas unas semanas, de un acuerdo para ocupar la sede de la antigua tienda de Zara Hombres ubicada en la plaza del Palillero de Cádiz, y que la multinacional gallega cerró a mediados del año pasado a la vez que abandonaba también el edificio de Zara en Columela y de otras marcas de la compañía como Massimo Dutti, Lefties, Bershka y Oysho.

Según ha podido saber este diario será una empresa dedicada a la decoración la que ocupe el edificio de Palillero, donde en su día estuvo Hermu. No ha trascendido el nombre pero sí que es un referente en un sector que, debido a la pandemia y a las etapas de confinamiento, está teniendo un gran auge en un intento de muchos por mejorar sus viviendas, tras incrementarse el tiempo en el que están ellas, tanto por obligación como por la implantación del teletrabajo.

El acuerdo con los propietarios, una familia gaditana, se cerró hace más de un mes. El interior del antiguo Zara Hombres se encuentra en muy buen estado de mantenimiento por lo que es de suponer que no se dilatará en el tiempo la apertura del nuevo negocio.

Si en este caso el acuerdo ya está cerrado, son varias firmas las que se han mostrado interesadas por ocupar el edificio donde estaba Massimo Dutti, también del grupo Inditex y que funcionaba en la calle Columela.

El inmueble cuenta con una superficie total de 850 metros cuadrados de los que 500 están abiertos al público. Dispone de ascensor y, al igual que el edificio del Palillero, se encuentran en muy buen estado de conservación.

La propiedad, también gaditana, pide una renta de 8.000 euros al mes, una cifra que está por debajo de la media del metro cuadrado en el centro histórico de la ciudad y más en Columela, considerada como el kilómetro 0 del comercio gaditano.

Junto a ello, la asociación Cádiz Centro Comercial Abierto tiene ya en marcha el nuevo servicio para promocionar la ciudad y atraer de esta manera a nuevos empresarios que ocupen en lugar de las firmas que se han marchado en los últimos meses o que den uso a los locales que permanecen cerrados desde hace años.

La asociación no funciona como intermediaria pero sí traslada a clientes interesados el potencial comercial de la ciudad, así como la oferta de locales que puede existir atendiendo a la demanda.

A la vez se está elaborando un exhaustivo censo con los locales que se encuentran vacíos, sus características y su ubicación.

Aunque la oficina acaba de ponerse en marcha ya hay un nutrido grupo de promotores, tanto de Cádiz como de fuera de la ciudad, que han pedido información sobre tiendas que están vacías a fin de poder valorar su ubicación en la misma. En estos casos los usos son muy variados.

Lo cierto es que a pesar de que existe una evidente demanda por abrir en Cádiz, la fuerza de la crisis o ya llegada a la edad de jubilación de sus propietarios, mantiene alto el número de locales que siguen cerrando sus puertas. Así ha ocurrido recientemente con dos locales en Corneta Soto Guerrero, uno de hostelería al bajar el negocio, y otro de moda, por jubilación.