Palo de los gordos el que sufrió ayer el CV Puerto Real en el estreno en el banquillo de Miguel Ángel Serrano. El conjunto puertorrealeño cedió por primera vez en lo que va de temporada una derrota en su feudo. Y además lo hizo de forma contundente, por 0-3 (22-25, 23-25 y 23-25) ante el Caravaca Año Santo 2010, que visitaba la cancha de los de la Villa en partido correspondiente a la séptima jornada de competición en la Superliga Masculina-2.

El Puerto Real llegaba al partido tras tres semanas de descanso, algo que en teoría le debería haber ayudado, mientras que el Caravaca acudía al envite después de descansar la semana pasada y caer derrotado, con antererioridad, ante el líder de la categoría, Unicaja Cañada de Vera.

Sin duda, el partido deparó emoción desde el primer momento, con ambos equipos tan igualados en el marcador que normalmente llegaban a los tiempos técnicos con ventajas mínimas sobre su par.

Así, los fallos puertorrealeños fueron claves en un partido en el que el Caravaca basó su juego en una completa defensa y en colgar balones a su estrella, Joao Ricardo. Estas premisas fueron claves en un duelo que fue igualadísimo hasta los puntos finales de cada set. Durante la primera manga, el saque puertorrealeño no cumplió las expectativas y eso provocó que los murcianos se acabaran llevándose el set por 22-25.

En el segundo parcial los blanquiverdes intercambiaban el liderazgo del set con los hombres dirigidos por Chema Nicolás, que finalmente se llevaron el set por 23-25. Esta tónica se repitió en el tercer parcial, manga en la que los murcianos se dedicaron a colgar una y otra vez balones sobre su opuesto Joao Ricardo, que hizo estragos en la defensa puertorrealeña con su fuerte pegada.