Otro comercio de barrio, cercano, arrancado del paisaje colectivo, que no de la memoria de los vecinos. Esta vez por motivos de salud de su propietario. Prensa y Revistas 'Paola', en Granja de San Idelfonso, frente a la Comisaría Provincial de Policía. A Fernando Pérez le han pesado los 34 años -su mujer abrió dos años antes- detrás del mostrador descansando lo mismo que las rotativas de los periódicos: tres días al año. 1 de enero, Sábado Santo y 25 de diciembre. Las tres fechas en las que por tradición no se edita prensa.

Sólo tiene 58 años, pero el cuerpo ya no le aguanta. "Es un trabajo muy pensionado", señalaba ayer su hijo Adrián. Y que lo diga. A las siete de la mañana ha sido todos estos años un kiosco de guardia para los más madrugadores. Para ello, el ya jubilado vendedor de prensa se levantaba a las cinco y media. El pasado domingo colgaba un cartel donde anunciaba el cierre y daba las gracias a la clientela. Le echarán de menos. Los vecinos tendrán que resetear sus pasos para saber encaminarlos a otro kiosco.

"No hay continuidad en la familia porque este trabajo es muy sacrificado. Es comprensible, aunque el sacrificio me permitió sacar adelante a la familia", decía ayer Fernando Pérez. Tres hijos con sus vidas encauzadas, tres futuros que parten de un pequeño negocio. Fernando es, como tantos, un héroe de a pie.

Aunque la venta de periódicos ha descendido "por culpa de internet", la crisis no es el motivo del cierre de 'Paola'. "Gracias a Dios las generaciones mayores siguen comprando la prensa. Me queda el consuelo de que mis clientes no se quedarán sin periódicos cerca porque hay varios puntos de venta por la zona", reconocía.

Fernando se mostraba muy agradecido a la prensa gaditana y sus canales de distribución. "He tratado con buenos repartidores y nunca he tenido problemas". Se despide -ironías de la vida- con un reportaje en 'Diario de Cádiz', después de haber vendido cientos de miles de ejemplares.

Fernando asegura marcharse con "tristeza". Añadamos otro sustantivo: orgullo. El barrio no olvidará a quien durante 34 años ofrecía, temprano, las noticias más frescas de la mañana.