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¿Por qué el olfato de los mosquitos siempre encuentra a los humanos para hacerles una picadura?

Un mosquito se posa sobre la piel de una persona

Un mosquito se posa sobre la piel de una persona / D.C.

Hay noches que se pueden hacer muy largas si un mosquito está sobrevolando la habitación. Sus zumbidos y sus picaduras, son una tremenda pesadilla. Y ya no solo en una habitación. En una noche en un campo con los amigos seguro que más de una vez habrás escuchado esta pregunta retórica: "¿Por qué siempre me pican a mí?".

Muchas personas no se explican el magnetismo que tienen para atraer a estos insectos que una vez que extraen tu sangre, te dejan cierto picor en la piel y hasta momentáneas ronchas. Por no decir, duraderas en algunos casos. 

La revista científica estadounidense Cell ha arrojado luz esta semana sobre el comportamiento de los mosquitos y está muy relacionado con su olfato, el cual está más desarrollado de lo que se pensaba. 

¿Por qué un mosquito encuentra a quién picar?

Son persistentes, difíciles de esquivar. Al final, siempre encuentran la forma de llegar a alguien para picar. ¿Cuál es la razón de esto? Muy sencillo, tienen un olfato muy desarrollado y los atraemos. Principalmente, el dióxido de carbono, expulsado al respirar, y el octanol, desprendido por el sudor, son las llamadas directas a las picaduras de estos insectos.

El mosquito no tiene solo una neurona con receptor de olor, sino varias. En cuanto una de ellas se activa, acude rápidamente a por su alimento. El dióxido y el octanol las perciben a partir de los receptores quimiosensoriales presentes en sus neuronas. La investigación explica que si un humano pierde un receptor deja de oler, el Aedes aegypti mosquitoes puede perder uno en alguna de sus neuronas, que tendrá otras que contará con más de un receptor.

El estudio se ha hecho en el tipo de mosquito hembra que transmite el dengue. En el trabajo científico, para comprobar qué neuronas se activaban, se logró inocular una serie de proteínas fluorescentes de colores para ver cómo reaccionaba el mosquito a un estímulo. Gracias a esto se vio que, además de reaccionar al octenol del sudor, algunos compuestos del amoníaco también provocaba a estos.

Así que los mosquitos, si no te encuentran por tu respiración, lo harán por tu sudor, y si no a través de algún resto de compuesto que hayas usado recientemente. Su olfato da para mucho y tienen varias alternativas.

En resumidas cuentas, esta investigación tiene como fin aportar valor en la eterna búsqueda del bloqueo de los receptores de este insecto. De esta forma, se lograría frenar la transmisión de enfermedades como el dengue, el zika, el virus del nilo y otras tantas que se contraen a raíz de sus picaduras. Aún no se sabe si el mosquito común o tigre, los que habitualmente proliferan más, también reúnen estas características olfativas. 

En cualquier caso, ya se sabe algo más que da respuesta a esa pregunta popular de por qué siempre el mosquito encuentra a quién picar y por qué más a unos que a otros. Todo depende de cuántas señales se dejen en el aire a través del dióxido expulsado o cuánto se sude.

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