Cuántos huevos se pueden comer a la semana: esto es lo que recomiendan los expertos

La clara del huevo contiene una proteína de gran calidad biológica

¿Cómo se llama la planta que te hará dormir como un bebé toda la noche y pocos conocen?

Huevos.
Huevos.

Los huevos desempeñan un papel crucial en las dietas alimentarias equilibradas. Son fuentes importantes de vitaminas A, B12, D, E, además de contener minerales esenciales como selenio, hierro y zinc. Pero hay más. La albúmina, compuesto fundamental de la clara, es la proteína de mayor calidad biológica que obtendremos de estos productos. Todas estas cualidades nutricionales hacen del huevo una muy buena alternativa a la carne o al pescado.

Sí hay que tener en cuenta que la yema es rica en grasa y colesterol, una circunstancia ésta última que durante años ha afectado negativamente al consumo de los huevos, llegando incluso a ser retirado de las dietas en muchas ocasiones con la falsa creencia de que perjudicaban a las personas que tenían niveles elevados de colesterol en sangre.

Sin embargo, esta circunstancia médica no es sinónimo de tener que evitar el huevo a toda costa. Según la Fundación Española del Corazón, la ingesta recomendada es de entre 3 y 5 huevos a la semana aunque si se tiene colesterol es necesario reducirlo (no eliminarlo de la dieta) a 2-3 huevos completos (clara y yema) a la semana o bien, optar por 2-3 yemas y 4-5 claras semanales.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece, sin embargo, unas pautas de consumo más amplias, sugiriendo que una persona sana puede consumir de manera saludable hasta 7 huevos a la semana y entre 3 y 4 quienes presenten altos niveles de colesterol.

La salmonelosis, el principal peligro de los huevos

La salmonela o salmonelosis es una infección bacteriana del tubo intestinal que, en la mayoría de los casos, se presenta en forma de fiebre, diarreras y/o vómitos y calambres estomacales entre las 8 y 72 horas siguientes a la exposición. La mayoría de las personas se recuperan en un pocos días a base de una dieta blanda y muchos líquidos, principalmente sueros para reponer los electrolitos que se pierden. Pero en otros casos, la diarrea puede causar una deshidratación más severa o tener mayores complicaciones que hagan necesaria la atención médica.

La bacteria que provoca esta enfermedad suele vivir en la carne de aves, huevos o productos a base de huevos crudos o poco cocidos, o en la leche no pasteurizada.

Para evitar su exposición, y en lo que respecta a los huevos, se recomienda:

  • no dejar nunca a temperatura ambiente los huevos o los alimentos elaborados con ellos
  • conservarlos en el frigorífico
  • no consumir huevos crudos
  • no comprar huevos con la cáscara rota o sucios
  • lavarse bien las manos y los utensilios antes de cocinarlos
  • romper el huevo en el borde de un recipiente distinto a donde lo vayas a batir
  • no lavar los huevos antes de meterlos en el frigorífico porque así se eliminaría la película protectora y se abrirían los poros de la cáscara
  • al separar las yemas de las claras, no usar la propia cáscara del huevo.
stats