El viernes pasado el Consejo de Ministros aprobó la nueva normativa que contempla la relación con los animales de compañía con el foco en reducir a 'cero' el abandono animal y poner coto a los circos con animales salvajes o el sacrificio.

Lo que a priori parece una acción legisladora positiva, en base a lo que pretende erradicar, ha llegado de hecho rodeada de polémica. Por ejemplo, ya creó discrepancias incluso en el seno del Ejecutivo puesto que desde Agricultura deseaban una normativa propia para aquellos perros considerados de caza así como las rehalas más enfocada a las circunstancias características de este tipo de animales.

Las tiendas de mascotas de Cádiz también han puesto el grito en el cielo porque según la ley no podrán vender en sus establecimientos animales, y, menos, exponerlos en sus escaparates bajo la pena de altas multas. Esto no hará otra cosa que potenciar la venta ilegal de animales, denuncian desde Cadizoo.

Se prohíbe la venta y crianza de animales en tiendas

La ley pone fin a una problemática que llevaba varios años sobre la mesa: a partir de su aprobación queda totalmente prohibido la comercialización de animales en tiendas dedicadas a mascotas. La nueva normativa también prohíbe la exhibición con fines meramente comerciales de este tipo de animales. Además, la crianza tan solo podrá ser llevada a cabo por criadores que cuenten con autorización, los cuales deberán figurar en un registro, quedando excluidos los particulares.

Del mismo modo, también se prohíben todas aquellas prácticas que impliquen algún tipo de sufrimiento en animales como el uso de pinchos o collares eléctricos. Dentro de la normativa se contempla impulsar los zoos en lugares de cría autóctona en cautividad así como la prohibición de tener más de cinco animales en la vivienda por parte de un particular.

La ley también arroja luz sobre los considerados como 'perros peligrosos', eliminando esta acepción y considerando que ningún animal cuenta con naturaleza peligrosa debido a su raza sino que deben ser valorados de forma individual. Así, se elimina la clasificación de este tipo de perros "sin perjuicio de que, reglamentariamente, se establezcan las condiciones en que deberían manejarse, previa realización de un estudio de sociabilidad".

Sanciones

La normativa establece un régimen de sanciones con hasta tres tipos de multas: leve, graves y muy graves. Las más graves podrían llegar a contar con sanciones de hasta 600.000 euros. Dentro de su reglamento sancionador contempla incluso multas para todos aquellos incumplimientos de la ley que deriven en un decomiso de la mascota y su posterior entrega a una protectora. De igual manera se podrá inhabilitar al culpable para la tenencia de animales "por un periodo máximo de cinco años para las infracciones graves y de cinco a diez años para las muy graves".