El Huerto

Orgullo cofrade de extramuros

  • La nueva junta de Gobierno, en su primer Jueves Santo como responsable de la hermandad

  • La marcha 'La Esperanza de Puerta Tierra' vivió su estreno

COFRADÍA de estreno. La primera del Jueves Santo, por un lado. Viniendo desde Puertas de Tierra y con diez horas de recorrido por delante. Todo un reto. Por otro, debut de la nueva Junta de Gobierno, que tomó posesión en junio de 2017. Ignacio Robles, hermano mayor, se enfrentaba a su primera salida procesional como máximo responsable de El Huerto. "Creo que hemos trabajado muy bien para llegar a este día. Nos sobra ilusión y esperamos que todo salga bien", comentaba minutos antes de la hora señalada. Se congratulaba de poner en la calle más de 200 penitentes, superando el número de los últimos años. Robles estaba tranquilo ante la amenaza de lluvia de la Madrugada. "Nos dicen que el riesgo empieza a las cinco y que a partir de las seis es casi seguro que llueva. Pero nosotros a esas horas ya estamos recogidos", explicaba.

Las primeras 'levantás' del Cristo y la Virgen estuvieron a cargo de Francisco Igartuburu

Sin tanta responsabilidad como Robles, aunque la tuvo en su día como hermano mayor, Fernando Reyna iba a procesionar en la presidencia del palio. "Esto no es eterno y la renovación es la clave para que una cofradía perviva. Los veteranos estamos muy contentos con la nueva junta. Con el relevo hemos dejado la cofradía en muy buenas manos", aseguraba mientras apuraba el último cigarrillo, el de los nervios.

En el patio de la parroquia de San Severiano se formaba la procesión, integrada por muchos niños. El grupo de monaguillos era uno de los estrenos de la hermandad. Antes de la salida, cofrades de El Huerto de toda la vida disfrutaban con intensidad de los momentos previos y echando la vista atrás. Uno de ellos, Francisco Igartuburu, que fuera miembro de la junta de Gobierno, se encargó de dar las primeras levantás de los dos pasos.

A las cinco en punto se abrían las puertas hacia una calle Tolosa Latour repleta de público en una tarde soleada pero con el frío amenazando en las sombras. Salía al exterior la cruz de guía para iniciar el Jueves Santo gaditano. Poco después aparecía el paso de misterio portando a Nuestro Padre Jesús de la Oración en el Huerto. En sus primeros andares, dirigidos por el capataz Óscar Jiménez, el acompañamiento musical de la Agrupación Ecce Mater sonaba a Señor de San Severiano, que encadenó con Orando al cielo.

Con mucha fluidez se iba organizando el cortejo. El palio con Nuestra Señora de Gracia Esperanza, dirigido por Fernando Reyna, salía mientras sonaba la Marcha Real. Cuando enfiló la recta de Tolosa Latour, la Banda de Música de Nuestra Señora de la Soledad de La Algaba (Sevilla), interpretó una marcha de estreno dedicada a la Virgen, La Esperanza de Puerta Tierra, compuesta por Pablo Ojeda, el director musical de esta formación. También es de Ojeda la marcha que sonó inmediatamente después, Madrugá Macarena.

A esa hora, el barrio arropaba a su cofradía esperando la vuelta del Señor y su Madre ya avanzada la madrugada de Cádiz.

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