Las obras, con un presupuesto superior a los 200.000 euros, están acabadas desde 2017. Pero los años pasan sin que la nueva estación de autobuses de San Fernando -una histórica reivindicación vecinal- se ponga en marcha. No se sabe qué ocurre ni cuáles son los problemas que impiden su apertura, los trámites que quedan pendientes o las posibles fechas que se manejan para que pueda ser una realidad.

En torno al proyecto el gobierno municipal guarda un absoluto silencio. Y las instalaciones, después de tanto tiempo cerradas y sin uso, acusan ya el paso del tiempo e incluso ha empezado a oxidarse el revestimiento exterior del edificio, que a buen seguro necesitará una importante inversión para asegurar su puesta a punto si alguna vez llega a ponerse en marcha. 

La portavoz del PP isleño, María José de Alba, ha denunciado una vez más la situación de abandono en la que se encuentra este proyecto que ejecutó la Junta de Andalucía como una actuación complementaria del tranvía al plantearse -dada su proximidad con la parada de La Ardila- como un apeadero intermodal de transportes que permitiera a los usuarios bajarse en este punto para enlazar con las líneas de autobuses urbanos e interurbanos, con el servicio de taxis e, incluso, con los vehículos privados, dado el amplio aparcamiento que existe en este punto. 

El caso es que, ejecutada la obra, correspondía al Ayuntamiento isleño afrontar la puesta en marcha de la estación de autobuses, que por otro lado el movimiento vecinal llevaba décadas reclamado e incluyendo en el catálogo de reivindicaciones conocido como la Carta Ciudadana. Pero de esto nada se sabe, lamenta el PP. "Y la situación sigue exactamente igual un año tras otro", ha advertido De AlBa, que ha recordado que no es la primera vez en la que los populares alzan la voz para exigir explicaciones al respecto sin encontrar más que un muro de silencio por parte del ejecutivo de Cavada. 

"Queremos saber qué ocurre porque la ciudadanía además necesita que se ponga en marcha la estación de autobuses", ha afirmado De Alba al exigir al equipo de gobierno que dé la cara y ofrezca explicaciones.  

De hecho, el PP de San Fernando ha mostrado serias dudas ante la posibilidad de que la actuación haya sido recepcionada por el Ayuntamiento isleño a pesar -afirma- de las declaraciones que en este sentido hizo la alcaldesa en 2020, hace ya dos años. 

La terminación completa de las obras de la futura estación de autobuses de La Isla -o apeadero intermodal de La Ardila- es completamente visible para los isleños desde mediados de mayo de 2017, de ahí que muchos se hayan preguntado por su puesta en marcha en reiteradas ocasiones. Las instalaciones, situadas justo frente al desaparecido polígono de tiro Janer y junto a la parada del tranvía en este punto, incluyen tres dársenas en batería, dos marquesinas y un pequeño edificio modular de 120 metros cuadrados para servicios y sala de espera.

Estas obras responden al compromiso adquirido por la Junta en este sentido en octubre de 2015, si bien ya en el proyecto inicial del tren-tranvía se hablaba de habilitar un intercambiador en la zona de La Ardila para facilitar la conexión entre distintos medios de transporte. De hecho, eso fue lo que llevó entonces al Ayuntamiento a dejar sobre la mesa el proyecto para la estación de autobuses que por aquellos años -hace una década- se quería adecuar en los terrenos recién desafectados de Janer en favor de esta otra opción.