La comunidad educativa del colegio San Ignacio ha trasladado este viernes sus demandas hasta la puerta del Ayuntamiento de San Fernando, donde ha llevado a cabo una simbólica concentración coincidiendo con la celebración del Pleno para hacer visible sus reivindicaciones y recordar que los problemas del centro tras la declaración de ruina de su edificio principal -que daba cabida al alumnado de Primaria así como a las dependencias administrativas- siguen sin resolverse. 

A pesar de las dificultades, la campaña puesta en marcha por el CEIP San Ignacio en defensa de la calidad educativa de la que lleva años haciendo gala ha dado resultado en la campaña de escolarización, ahora en su recta final (solo quedan los días de Semana Santa en los que solo se podrán presentar solicitudes telemáticas). 

El centro ha registrado ya 10 solicitudes de nuevo ingreso para alumnos de 3 años (segundo ciclo de Infantil), lo que supone una cifra considerable en el contexto actual, en el que el descenso de la natalidad se nota especialmente en las matriculaciones de los colegios. De hecho, solo una familia ha optado por cambiar a su hijo de colegio y desde la comunidad educativa se ha apuntado a 4 solicitudes más que están "en duda" porque no tienen garantías de que el comedor vaya a estar en funcionamiento en el centro en el próximo mes de septiembre.

"Es una cuestión que depende de las administraciones local y autonómica", ha explicado el director del centro, José Luis Romero, que ha apoyado la concentración llevada a cabo a las puertas del Ayuntamiento isleño. 

Protestas de la comunidad educativa del CEIP San Ignacio a las puertas del Pleno de San Fernando.

Sin garantías para el regreso del comedor en el próximo curso

Tras la declaración de ruina del edificio principal, que se aprobó con carácter definitivo en el pasado mes de febrero, tuvo que trasladarse forzosamente este servicio al colegio Quintanilla, en la misma zona, al que a diario acuden los alumnos. 

El regreso del comedor al colegio San Ignacio, que se espera que pueda estar resuelto para principios del próximo curso, depende de las obras de adecuación del office que le dará servicio, que todavía no se han iniciado. 

Para ello, como se ha recordado en la protesta, será necesario la ejecución de las obras de subsanación de las instalaciones que permitan la obtención de la OCA (Organismo de Control Autorizado) por parte del Ayuntamiento isleño, la redacción del proyecto de adecuación del office por parte de la APAE (Agencia Pública Andaluza de Educación) y, finalmente, la realización de las obras en sí, que el Consistorio se ha comprometido a ejecutar.  

"Es una lástima pero no podemos dar garantías de que vayamos a tener el comedor en el centro en el próximo curso", se ha reconocido en la concentración al referirse a la incertidumbre de ciertas familias en este sentido habida cuenta de los trámites que restan y -lamentan- de la inactividad de ambas administraciones en este sentido. 

Aún así, el CEIP San Ignacio saca pecho por cumplir con las ratios de matriculación y porque sigue recibiendo solicitudes de familias interesadas en matricular a sus hijos.  En este sentido, se ha trasladado también en esta concentración su apoyo a los padres que han confiando en el centro en la campaña de escolarización, lo que pone de manifiesto que el colegio "está más vivo que nunca", que es precisamente uno de los lemas que se esgrime en las movilizaciones. 

Desde la comunidad educativa del CEIP San Ignacio se ha cuestionado la declaración de ruina del colegio, tal y como recogían en sus alegaciones, donde se argumentaba con un informe técnico la viabilidad de unas obras que permitieran poner a punto el centro. 

También se ha señalado que entre 2020 a 2023 se quedaron sin invertir casi 800.000 euros destinados al mantenimiento de los colegios de la ciudad, partidas que a pesar de que inicialmente estaban recogidas en los presupuestos no se llegaron a gastar.