“Todos los días me acuerdo de Camarón. Cuando él murió me vine abajo y ya no soy el mismo”. Aunque once años nos separan de estas palabras, la gente que conoció, vivió y amó a Jesús Monje Cruz, Pijote, dan fe de que el hermano de José tuvo presente a la leyenda del cante hasta los últimos momentos de su vida.

Pijote, que dejaba este mundo en la mañana de hoy 11 de octubre a la edad de 69 años por mor de esa enfermedad que todos tememos pronunciar y que padecía desde hace años, era de los hermanos Monje Cruz el que más se parecía a Camarón. Se parecía en el metal, “en sus cualidades vocales”, aunque adoleciera de ese conocimiento “profundo” del jondo que manejaba el genio de San Fernando, recuerda uno de los amigos más cercanos a la familia de Camarón, Lolo Picardo, de la Venta de Vargas.

“Es una pérdida dolorosa para nosotros, muy dolorosa, aunque supiéramos que él ya andaba malito desde hace tiempo”, se lamenta Picardo cuyos padres eran vecinos de los Monje a los que trataban siempre “como familia”. De hecho, como recuerda el propietario del establecimiento de solera donde Camarón dio sus primeros ayeos, “Pijote se venía aquí a hablar con mi padre, a hablar de sus cosas... Era un hombre bueno, cariñoso y su muerte ha sido una gran pérdida para todos los que lo conocíamos”, refiere sobre el hermano de Camarón que llegó a publicar en 1994 aquel Quejío a Mi Hermano Camaron. Viento de Menta, “que siempre tuvo en la boca, siempre recordaba Pijote esa grabación”, rememora con nostalgia.

Y es que, aunque en los últimos años, Jesús Monje Cruz se dedicara al pescado en la isleña plaza de San Antonio con Antonio El Caña, hubo un tiempo en el que dio la vuelta a España con su hermano, debutando con 23 años junto a figuras como Lola Flores y Paco Cepero, “con quienes ganaba mil pesetas diarias”, tal y como aseveró el propio Pijote en aquel gran homenaje que en el año 2007 le dedicó el mundo del flamenco en la plaza de toros de El Puerto, un día hermoso donde le rindieron pleitesía artistas de la talla de Raimundo Amador (que conocía a Pijote “desde chavalillo”), Duquende y Navajita Plateá, entre otros.

En otro homenaje, el que recibió la memoria de Camarón a los 20 años de su muerte, participó Pijote, esta vez como cantaor en el año 2012. Aunque también hay que recordar que al hermano de José Monje Cruz también se le rindió tributo en abril del pasado año en su ciudad, en la discoteca Nueva Habana, con un cariñoso reconocimiento de parte del mundo del flamenco y la concejalía de Cultura del municipio donde participaron cantaores como Antonio Alemania, Juan Villar, Jesús Castilla, Paco Manano, Antonio El Patilla, el Aula de Flamenco y Fusión, Inma Lara, Paqui de La Isla, Javi Bey y La Tico .

Toda la familia flamenca vuelve a recordar estos días al isleño cuyo cuerpo fue trasladado al tanatorio de San Fernando, tras fallecer en el Hospital Puerta del Mar de Cádiz. Mañana 12 de octubre está previsto que se celebre su funeral.