El Ayuntamiento de San Fernando ha mostrado su "especial preocupación" por la cobertura de los menores de la ciudad para los que se ha determinado que es necesario un refuerzo alimentario ante el cierre de los comedores escolares que ha obligado el estado de alarma y la crisis sanitaria del coronavirus.   Según ha explicado la alcaldesa, Patricia Cavada, los Servicios Sociales han detectado que en San Fernando en total hay 286 niños en esta situación cuyas familias ya están cobrando ayudas municipales y que deberían estar cubiertos por el Programa de Refuerzo de Alimentación Infantil, que financia la Junta de Andalucía y que se gestiona a través de los colegios.

"Sin embargo, solo 30 de ellos están admitidos en el programa, apenas un 10%, "ya que el gobierno andaluz cerró la aplicación que usaban los directores para ello".

De esta forma, hay 256 menores (un 90% del total) que, aunque lo necesitan se han quedado fuera "y que, al menos, están recibiendo las ayudas de emergencia social que concede el Ayuntamiento a sus familias", ha expuesto Cavada.  La alcaldesa ha vuelto a insistir en la necesidad que haya cooperación entre las administraciones en estos momentos tan complicados y que haya coordinación y trabajo conjunto para plantar cara a la crisis y dar coberturas sociales. Por eso, ha apuntado que "si todos los menores que lo necesitan estuvieran recibiendo las tres comidas por parte de la Junta de Andalucía supondría un alivio para sus familias, que podrían destinar las ayudas de emergencia social que les estamos dando desde el gobierno municipal a otras necesidades también urgentes y podrían contar con más recursos en esta difícil situación".