La Concejalía de Fiestas ha vuelto a contactar con los caseteros para conocer su opinión sobre la suspensión de la Feria del Carmen. El Ayuntamiento quiere consensuar la decisión sobre esta fiesta isleña que se vería afectada, como los festejos de otras localidades del entorno, por las consecuencias de la pandemia del coronavirus. 

La prolongación del estado de alarma, las restricciones que se previsiblemente se mantendrán para volver poco a poco a la normalidad y la imposibilidad de contar con una fecha para esta posibilidad hace que en las últimas semanas el equipo de gobierno esté estudiando qué hacer con la Feria del Carmen y de la Sal. Por eso desde la Concejalía de Fiestas se ha contactado hasta en dos ocasiones con los caseteros para pulsar su opinión.

A estas cuestiones se suman los tiempos que la administración maneja habitualmente para la preparación de unos festejos de estas características que precisan de la tramitación de contratos para los trabajos necesarios en el recinto ferial y la prestación de determinados servicios. Los plazos se están acortando, de ahí que se haya consultado el parecer de las entidades y empresarios que montan caseta en La Magdalena para tomar una decisión consensuada.