La reina Letizia ha sido protagonista de una polémica captura que ha desatado un revuelo en las redes sociales durante su visita a Salamanca este martes 20 de febrero. Durante su llegada al aeropuerto de Matacán, la reina se asomó desde su coche para saludar a un grupo de agricultores que la recibieron a su llegada, un gesto que fue capturado por algunos tuiteros y compartido ampliamente en las redes sociales.

La escritora Pilar Eyre se ha sumado a la difusión de esta imagen, compartiéndola con sus seguidores, describiendo simplemente el momento como "Letizia saludando a los agricultores y ganaderos en huelga en Salamanca". Sin embargo, este gesto aparentemente inocente no pasó desapercibido y generó una oleada de reacciones entre los usuarios de la plataforma.

Letizia saludando a los agricultores y ganaderos en huelga en Salamanca. Fuente: ⁦@s24horas⁩ pic.twitter.com/qGPUCqN8S3

— Pilar Eyre (@pilareyre) February 20, 2024

La imagen de la reina Letizia saludando desde el coche a los agricultores en Salamanca ha generado una amplia gama de comentarios, algunos de ellos críticos y otros más irónicos. Uno de los seguidores expresó su inquietud al comparar la imagen con una escena de Cuarto Milenio, añadiendo un toque de humor negro al sugerir la presencia de "fantasmas de fondo o espíritus".

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Sin embargo, no todos los comentarios fueron jocosos. Algunos usuarios manifestaron su indignación hacia el gesto de la reina, cuestionando su significado y sus implicaciones. Uno de ellos denunció lo que percibió como una actitud de servilismo hacia la monarquía, expresando su descontento con la institución y calificándola como "obscenamente millonaria". El comentario más polémico ha sido el de algunos usuarios, que dejaban entrever que el gesto de la reina, con la mano demasiado recta y alzada, emulaba saludos del pasado.

Estas reacciones evidencian una vez más cómo las acciones y gestos de los miembros de la realeza están sujetos a un escrutinio público constante, especialmente en un contexto donde las redes sociales juegan un papel fundamental. Esta polémica fotografía vuelve a poner de manifiesto las opiniones divergentes sobre la monarquía y sus representantes.