Es uno de los rostros habituales de los desfiles de moda. Victoria Federica no falta a su cita con diseñadores y modelos, siendo una de las invitadas más constantes de los últimos grandes eventos de la moda internacional. Esta vez, tras dejarse ver en la Semana de la Moda de París, la miembro de la Casa Real ha reaparecido en París para asistir como invitada a un desfile de Dior centrado en la Alta Costura. 

La nieta del rey emérito ha podido compartir espacio con grandes de la moda como Sofía Sánchez de Betak, Keanne Damas, Lily Aldrige o Bianca Brandollini. Por primera vez, la hija de la infanta Elena ha apostado por un estilo diferente al acostumbrado. Victoria Federica ha portado una minifalda gris. En la parte de arriba destacaba una camisa blanca clásica y una chaqueta también grisacea. Como complementos ha escogido unos zapatos de charol y el popular bolso de Lady Di en su versión lite. 

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por @vicmabor

El desfile al que ha acudido esta vez Victoria Federica ha sido el de Alta Costura organizado por Dior, en el cual la marca ha presentado su colección otoñal para este año. Con el folclore como principal leitmotiv, el desfile ha contado con guiño a Ucrania. La decoración del espacio donde se ha desfilado ha ido a cargo de Olesia Trofymenko, la ucraniana que ha diseñado los murales con flores que presidían la sala.

Esta nueva labor de Victoria Federica le estaría dando mucho dinero a la hija de la infanta Elena. Si bien la influencer no necesitaría trabajar para vivir, Victoria Federica asegura sentirse muy realizada con esta nueva profesión en la que se está implicando al máximo. Además, tras romper con Jorge Bárcenas, su asistencia a este tipo de eventos le ayudan a estar con la mente más despejada, superando los vaches por los que está pasando.