Esta semana se ha retomado la actividad en el Complejo Municipal de Piscinas, pero solo para los trabajos de preparación de la piscina de verano, que espera poder abrir sus puertas el próximo 15 de junio. Los trabajadores de CooperActiva, la cooperativa que se hizo con la concesión para explotar el complejo, ya están inmersos en los preparativos de una instalaciones que, en el caso de la zona exterior no funciona desde el pasado mes de septiembre, se cerraron al público en su totalidad poco antes de decretarse el estado de alarma.

En este tiempo, la plantilla compuesta por 12 cooperativistas y 7 trabajadores por cuenta ajena han estado acogidos a un ERTE. En principio, la plantilla se va a ir incorporando de forma paulatina, siendo los miembros de la cooperativa los primeros en retomar su puesto. Y es que, como era de esperar, a partir de ahora las necesidades de personal no van a ser las mismas.

CooperActiva tendrá que adaptar el aforo de público a lo que dicten las autoridades y que se baraja sea un 50%. Esto, en el caso de la piscina de verano, será alrededor de 500 personas. La distancia social entre los usuarios y la limpieza y desinfección del recinto, especialmente de las zonas comunes, serán nuevos protocolos que deberán adoptar.

Por ello, en estos días han comenzado con el acondicionamiento de los vasos al aire libre de cara a una reapertura que deberá de contar, además de con el permiso del Ministerio de Sanidad, con el del Ayuntamiento. En el caso de la piscina cubierta y de las actividades deportivas que ofrece esta misma cooperativa, se deberá esperar como mínimo hasta el mes septiembre para que puedan ponerse en marcha, adaptadas siempre a la nuevos protocolos de seguridad.

El Ministerio de Sanidad ha publicado un protocolo para la preparación de las piscinas frente al coronavirus. El documento, consensuado con las Comunidades Autónomas, establece las medidas preparatorias necesarias para la apertura de las piscinas cuando así se establezca en función de las fases del Plan de Transición hacia una nueva normalidad. En su informe, Sanidad apunta de que no hay evidencia de que el virus pueda transmitirse a las personas a través del agua en piscinas, jacuzzis o spas.