Compañía: La cochera. País: Argentina. Texto: Roberto Arlt (versión libre de Los siete locos y Los lanzallamas). Dirección y puesta en escena: Paco Jiménez. Intérpretes: Marcelo Castillo, Bati Diebel, Marola Farías, Giovanni Quiroga, Rita Novillo, Guillermo Wright, Sonnia Viliecca, Galia Hohan y Paco Giménez. Lugar y día: Sala Batillo, 29 de octubre.

Si el autor se sitúa por encima de sus personajes, estos se vuelven guiñoles. Como tales se mueven en el reducido espacio de la sala Batillo, como buscándose a sí mismos y tropezando los unos con los otros, justificando así ese "choque de cráneos" del título. Se trata de una versión libre de dos novelas de Roberto Arlt (Buenos Aires, 1900-1942) autor y periodista argentino, de donde el subtítulo de "aguafuerte" homenajea sin lugar a dudas la serie de artículos donde describió la vida cotidiana de su ciudad o las impresiones de algunos de sus viajes. "Absurdismo" y existencialismo inundan su obra teatral, estrenada fuera de los circuitos comerciales y la estética de su tiempo lo calificó de "descuidado", aunque al mismo tiempo se le considera el primer autor moderno de la literatura de su país. En la escena, una mesa con una máquina de escribir, preside la espacio y el actor que ocupa ese lugar adquiere la impronta del escritor acosado y rodeado por sus personajes. Como en un sueño, se desdoblan, se transforman, se travisten, se aman, pero, sobre todo, se odian, en lo que parece un surrealista vodevil con tono, a veces, de culebrón o melodrama cargado con mucho humor. Los actores hacen gala de su profesionalidad, veteranía y recursos varios, pero el espectáculo parece no avanzar, ni progresar, como si pudiera acabar en cualquier momento o continuar eternamente. Como sísifos condenados a representar sus miserias por siempre.