Triana según Mairena
Universal edita en CD, por vez primera de forma íntegra, los dos discos que le grabó a Antonio Mairena en los años 70
Antonio Mairena. Guitarra: Melchor de Marchena y E. de Melchor. Universal.
Este disco reúne, por vez primera de forma íntegra, y además con los cantes en su orden original, los dos discos que el maestro de los Alcores firmó para Philips, Cantes de Cádiz y los Puertos y Triana, raíz del cante, ambos editados en 1973. Acompañado de la guitarra sabia de Melchor de Marchena y con un jovencísimo Enrique de Melchor estrenándose en el estudio como segunda guitarra. Como siempre en el caso del cantaor que nos ocupa, lo más interesante de la entrega son los estilos por seguiriyas y soleares, los cantes con los que más se identificaba nuestro intérprete. De las primeras se incluyen, según nos explica el cantaor en sus memorias, Las confesiones de Antonio Mairena, cantes del Nitri, Perico Frascola y El Mellizo, por un lado, y de los Cagancho, el Colorado y el Planeta, por el otro. Los aires de los Puertos destacan por su plasticidad melódica y en ellos la entrega de Mairena alcanza uno de sus máximos históricos. Además, la melodía atribuida en este cante a El Nitri no era conocida hasta que Mairena la rescató. Muy emocionante también la seguiriya atribuida al Tuerto la Peña y rescatada por la Niña de los Peines que se inicia con unos emotivos tonos mayores. Respecto a los cantes trianeros diremos que en su versión de los cantes de Cagancho sigue el de Mairena a Tomás Pavón. La versión del Planeta la debe, sin embargo, a Pepe Torre y es una auténtica obra maestra de concisión y efectividad lírica que conecta con el origen mítico de este arte en el cantaor trianero del que nos habla Estébanez Calderón en sus Escenas andaluzas. Y las soleares: cuatro cortes por este palo. Las soleares de Cádiz y Jerez se inician con un intimismo asombroso en la guitarra de Melchor de Marchena. Cantes de Paquirri y el Mellizo de Cádiz. Sigue el cantaor en el primer caso a Aurelio Sellés, principal transmisor de la escuela gaditana, aunque dándole su personal matiz. Y de Jerez uno de los estilos más raros y hermosos, el de Teresa Mazzantini, que grabara hace unos años, con la misma letra firmada por Mairena pero que remite al cancionero Demófilo, el mismísimo Miguel Poveda.
Respecto a los cantes por soleá trianeros, incluidos por vez primera en CD, si exceptuamos la edición institucional que de las obras completas hizo la Junta de Andalucía, el propio cantaor nos informa de que se trata de cantes de La Andonda, Pinea y El Quino, completados con dos estilos propios del cantaor, según aseguran Luis y Ramón Soler en Los cantes de Antonio Mairena.
En el mismo disco dedicado a los cantes gaditanos nos encontramos a Mairena cantando por tangos por partida doble y los famosos tanguillos Tres cuadros, de los que el propio cantaor renegara en su momento. Tonás, romance mairenista, cantiñas, bulerías y giliana completan la selección.
La edición de estas dos joyas mairenistas puede pasar desapercibida por el aficionado dadas las características de esta edición: se ofrecen los títulos de los cantes, sin decirnos de qué estilos se trata, mientras que la información sobre los guitarristas se presenta diluida en un texto confuso en el que se mezclan frases extraídas de los textos de los vinilos originales, firmados por Rafael Belmonte, con otros de José Manuel Gamboa. Los textos de ambos estudiosos se ofrecen sin solución de continuidad, formando un todo, y sin atribuirlos a sus autores.
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