Lobos con piel de cordero, corderos con piel de lobo, dualidades ambiguas y engaños en clave de humor. Y crítica. Crítica radical y rompedora. La ópera de tres centavos, obra cumbre de Bertolt Brech y Kurt Weill, interna al espectador en una parodia donde nadie es lo que parece. Un juego de espejos que la compañía sevillana Atalaya pondrá en escena este sábado en el teatro municipal Pedro Muñoz Seca, en El Puerto.

Siete actores y otros tantos músicos en escena protagonizan uno de los espectáculos más ambiciosos de Atalaya, que este año cumple 25 años de existencia.

Galardonada con el Premio El Público a las Artes Escénicas, la versión de La ópera de tres centavos de Atalaya bebe del espíritu transgresor del texto original. "La Ópera... presenta a la gente decente como criminales y a éstos como gente decente. Bandidaje y respetabilidad burguesa se transforman uno en otro constantemente", informan desde la compañía dramática y , además, advierten que "las canciones son el momento cumbre de cada escena en las que el sarcasmo llega al límite, creando una gran complicidad con el público". Así, Brecht despertaba una actitud activa, comprometida, crítica y no meramente contemplativa y alienable en los espectadores.

El estreno de La ópera de tres centavos en 1928 supuso un acontecimiento sin precedentes en Berlín, ya que suponía un cambio radical en la manera de concebir tanto la ópera como los espectáculos musicales con raíces en el cabaret.

De esta forma, por el escenario del Pedro Muñoz Seca desfilarán personajes como Jonathan Jeremías Peachum y su esposa Celia, que regentan una trapería que es la tapadera de un red de tráfico de mendigos, Mackie Navaja, el más conocido bandido de la ciudad, que realiza un simulacro de boda con la joven hija de éstos, Polly Peachum, o Brown el Tigre, el corrupto jefe de toda la policía de la gran ciudad.

Todos ellos se enredarán en una red de trampas y triquiñuelas con la que Atalaya ha recorrido más de 30 provincias españolas y que este sábado recalará en el coliseo portuense.