El acto de entrega de depósito temporal del manuscrito El Museo Pictórico y Escala Óptica, del pintor y tratadista Antonio Palomino y que pertenece al instituto Columela, al Archivo Histórico Provincial de Cádiz se celebró ayer en la sede de la calle Cristóbal Colón. El manuscrito será restaurado en el taller del archivo para su posterior digitalización en el servicio de reproducción del centro gaditano, dependiente de la Junta de Andalucía. Posteriormente se devolverá a sus titulares, para que quede nuevamente albergado en la sede de la biblioteca del instituto de la capital.

Junto a Mercedes Colombo, delegada territorial de Cultura, estuvieron en el acto la directora del Columela, Coral González, y el director del Archivo Provincial, Santiago Saborido, que explicaron que la obra está considerada como una de las principales fuentes para la historia de la pintura barroca española.

La delegada de Cultura y Patrimonio Histórico subrayó la importancia de este acto “que supone el primero del acuerdo de colaboración que se va a llevar a cabo desde la delegación territorial con el Columela, un instituto que es un referente de la educación en nuestra provincia. Por lo tanto con la cesión de este manuscrito se da el primer paso de la línea de colaboración, junto con la delegación territorial de Educación”.

La delegada añadió que se va a colaborar con el centro para poner en valor los fondos documentales que posee el instituto. “Hoy empezamos con la entrega de este libro, esta obra fantástica de Antonio Palomino para que el Archivo lo restaure y lo ponga en condiciones para su posterior investigación, una vez sea devuelto al Instituto”. Mercedes Colombo recordó que “la intención y el compromiso de la delegación es el de seguir restaurando otros fondos y conseguir que el instituto se convierta en un centro de interpretación de la educación en la provincia de Cádiz, y también en un centro de investigación. De esta manera se pondrá al alcance de todos los ciudadanos que quieran visitar y consultar estos maravillosos e importantes fondos, que constituyen una gran y variada riqueza patrimonial para el conjunto de la sociedad de la provincia”. Con este primer paso “continuaremos trabajando pues es nuestra obligación prestar los servicios necesarios al instituto y que la ciudadanía pueda conocer el crucial papel que este centro ha jugado en la historia de la Educación gaditana, siendo uno de los pilares fundamentales de la misma”.

A continuación la directora del Columela declaró que se trataba de “un día importante de cara a la colaboración con las delegaciones de Cultura y Educación y la posibilidad de crear ese centro de interpretación de la educación. El instituto Columela es un centro histórico, el primer centro de bachillerato provincial público, y posee unos fondos bibliográficos y científicos a los que la ciudadanía debería tener acceso. El centro cuenta con más de 3.500 volúmenes patrimoniales y la joya es el libro que depositamos para su restauración. Las promesas se cumplen y hoy comenzamos un camino precioso de restauración, de creación de esa biblioteca histórica, punto de encuentro de todos los investigadores y aquellas personas que quieran conocerlo. El libro se encuentra en las manos de los mejores técnicos y confío en seguir trabajando y avanzando en la difusión de la cultura y del patrimonio educativo de la provincia de Cádiz”.

El director del Archivo Histórico Provincial de Cádiz, por su parte, se refirió a que “esta obra es de un cordobés de Bujalance, del siglo XVII, Antonio Palomino de Castro. Un carmelita, fraile y autor de esta obra que consta de cuatro partes:

Teórica de la pintura, Práctica de la pintura, El Parnaso español, pintoresco y laureado; e Índices y Tables. Los dos primeros tomos versan sobre la práctica y el arte de la pintura siendo el tercer tomo un valioso material bibliográfico de pintores españoles del Siglo de Oro. Aunque la primera edición es de los primeros años del siglo XVIII, los dos tomos que se van a intervenir en el Archivo, son de su segunda edición, concretamente de 1797”.

Saborido relató, para finalizar su intervención, que “la obra tiene problemas a simple vista de pérdida de las encuadernaciones por su uso, así como descosidos de parte de sus cuadernillos, como roturas y pérdidas de papel por la propia manipulación del ejemplar. Así, el proceso consistirá en su intervención en el taller de restauración del archivo, para su reencuadernación y montaje de los cuadernillos descosidos, así como la reintegración de la fibra de papel perdida con injertos de papel japonés y nuevo apresto”.