La sierra de Cádiz prevé cosechar un 40 por ciento más de aceite que en 2024
La provincia se convertiría así en una importante excepción dentro de la campaña andaluza
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Las previsiones de COAG-Andalucía para la cosecha de aceite este año arrojan en torno a un 40% más de producción en la sierra de Cádiz que en 2024: una circunstancia que la convierte en una anomalía dentro de lo que se espera sea la recolección de este año en la comunidad autónoma andaluza. Juan Herrera, presidente de la Cooperativa de Algodonales, ha indicado que "la aceituna está fresca y el calor ha evitado el ataque de la mosca". Aun así, ha advertido que el actual "es un momento sensible y en quince días no se sabe qué puede pasar si vienen tormentas o granizadas".
En Villamartín y Bornos, con olivares más jóvenes y súper intensivos, se espera una cosecha normal. La menor lluvia en zonas bajas ha permitido una floración adecuada en la provincia, y menos daños.
Esa no parece que vaya a ser, sin embargo, la tónica general este año en el olivar andaluz. Así, la conclusión de COAG- Andalucía tras contactar con varios de los productores es que, en la próxima campaña, "habrá menos aceite de oliva del que se esperaba", si bien "el otoño será clave" para definirla finalmente. La vecería, las altas temperaturas registradas en mayo, junio y en este mes de julio o el impacto de plagas como el prays y el algodoncillo "están condicionando una previsión a la baja", según ha informado la organización en una nota.
En este sentido, aunque todavía quedan meses decisivos, especialmente el otoño, la mayoría de provincias podría tener "una cosecha menor o, en el mejor de los casos, similar a la pasada campaña".
MAPA DEL ACEITE EN ANDALUCÍA
La principal productora andaluza, Jaén, puede dejar "cifras preocupantes" debido a la vecería y el calor. Concretamente, en zonas como la Sierra Sur (Alcalá la Real, Alcaudete), los olivareros hablan de hasta un 30 por ciento menos de cosecha, mientras que en Mancha Real prevén un 60 por ciento de la producción respecto al año anterior debido a una floración irregular y la amenaza del prays. En La Loma, Torreperogil y Villacarrillo las mermas se sitúan entre el 30 y el 40 por ciento y en zonas como Andújar están especialmente afectadas en los secanos por el mal cuaje, mientras que en las zonas húmedas, el repilo ha debilitado mucho el arbolado.
En Córdoba, los agricultores también señalan a la vecería, el calor y la fuerte presión de plagas como actores responsables de una menor producción de la esperada inicialmente. Mariano de la Rosa, olivarero de secano en Baena y Cañete de las Torres, afirma que "este año ya se ve algo menos de carga y, como mucho, se espera igualar la campaña pasada", subrayando la importancia de las lluvias otoñales para terminar de definir la producción.
En la zona del Alto Guadalquivir, Rafael Félix, productor de olivar tradicional, ha comentado que "hay una vecería importante respecto al año pasado y, además, la primera ola de calor en primavera se llevó mucha flor". También ha aludido a una "incidencia de algodoncillo y especialmente agresiva de prays, con "pérdidas del 30 al 40 por ciento en el cuaje".
En Fuente Palmera, Salvador Fernández apuntado que "algunas fincas han quedado al 50 por ciento por el ataque de prays, pero otras están bien cargadas e incluso algo mejor que el año pasado gracias a nuevas plantaciones". Ha añadido que "en el olivar viejo ha faltado tratamiento y eso ha pasado factura".
En la provincia de Sevilla, la situación varía mucho. En Arahal, Francisco Rodríguez ha afirmado que "el calor ha producido algunos daños, pero en general la cosecha es normal, ni por encima ni por debajo", aunque en el Aljarafe se espera menor producción. Ha apuntado, igualmente, que "la aceituna tiene más tamaño porque el árbol ha tirado mucha carga, por lo que es probable que se destine más cantidad a mesa".
En Lebrija, Francisco Tejero, productor en olivar súper intensivo, ha declarado que "la floración ha sido tardía y se ha estropeado mucha flor", a lo que ha unido "mucho repilo". Ha agregado que "se han tenido que hacer más tratamientos y abonos foliares, con un fuerte incremento de costes". Ha precisado que en arbequina la situación es peor, mientras que en arbosana "la lluvia afectó menos a la floración, pero se nota el daño en hoja y vigor".
Con respecto a la sierra de Málaga (Ronda, Sierra Yeguas), Juan García ha explicado que, "aunque se esperaba una buena cosecha, finalmente es mediana y en algunas zonas ha desaparecido por completo debido al prays, que ha llegado a provocar hasta un 80 o 90 por ciento de merma".
En la Vega (Antequera, Mollina, Alameda), la situación es más favorable y esperan superar la producción anterior, aunque no en gran medida. Como ejemplo, en la Cooperativa de Alameda, el año pasado se procesaron 10 millones de kilos entre verdeo y almazara, y ahora esperan unos 15 millones.
En Los Vélez (Almería), Inmaculada Arjona destaca que "este año se espera algo más que el anterior, pero lejos del récord de hace dos años". Indica que "hay mucha flor y el olivo está verde", por lo que la campaña será intermedia tras la cosecha casi nula del año pasado.
En todo caso, desde COAG-Andalucía se ha insistido en que todavía es pronto para hacer una previsión cerrada de la producción de aceite de oliva, ya que el olivar necesita condiciones favorables en otoño para completar la maduración.
Por último, desde COAG se han referido al enlace de campaña. Ha recordado que las salidas de aceite siguen en niveles elevados, por lo que se espera un enlace aún más corto que el del año pasado, "lo que puede repercutir en la disponibilidad y precios de cara a la próxima campaña".