Una fiesta que tiene mucha solera

Rota tiene muchísimas fechas históricas. Los días 17, 18 y 19 de mayo de 1942 también marcaron un antes y un después. Fue entonces cuando se celebró la primera feria de este municipio de la Costa Noroeste gaditana.

Para conocer su origen hay que remontarse a un año antes. En 1941, el Ayuntamiento recibió un escrito de la Hermanadd de San Isidro solicitando a la Corporación la celebración, como ya ocurría en otras localidades, de una feria que fomentara la compraventa de ganado dentro y fuera de la villa, habida cuenta de la importante cabaña existente en el municipio. Según recuerda la revista conmemorativa del 75 aniversario que ha editado el Consistorio, la propuesta fue atendida favorablemente por la Administración local y el Gobierno civil, de manera que al año siguiente se hizo realidad.

Aquellas primeras ferias de ganado se celebraron en la zona donde actualmente se encuentran los colegios Luis Ponce de León y Pedro Antonio de Alarcón. Desde luego, eran otros tiempos. El desarrollo urbanístico obligó a buscar una nueva ubicación en los terrenos de la actual avenida María Auxiliadora, en concreto frente al centro de salud y el parque de El Mayeto. El emplazamiento definitivo llegaría con la adquisición municipal de los suelos que conforman actualmente el recinto ferial.

Las primeras casetas comerciales de roteños que regentaban pequeños negocios de hostelería dejaron paso a otras, como las del Casino, la Artillería de Costa, la de la Marina Española y, cómo no, la "americana" que se instaló cuando ya estaba operativa la Base Naval. El recinto militar que ha marcado la vida de la población roteña desde mediados del siglo pasado también tiene su trocito de historia en esta feria con tanta solera que comenzó siendo de ganado y acabó brillando como una fiesta de primavera.

Además del Pabellón Municipal, Nueva Jarilla y La Espuela, que son las casetas, digamos, oficiales, destacan, entre otras, las de las peñas deportivas del Rota, la Roteña y Dosa; las que montan los amigos de la peña La Amistad, El Rancho Los Doce y la Linense; y las gremiales, como las del Club de Funcionarios y la peña El Taxi. También hay no pocas entidades que mantienen año tras año su tradición de montar casetas portátiles y disfrutar de la Feria en un ambiente de estrecha convivencia.

En palabras del alcalde, Javier Ruiz, "aquellos orígenes impulsados por la Hermandad de San Isidro, vinculados al comercio de ganado, y en las que se momentaban pequeñas casetas para atender a los compradores y cerrar tratos, han desembocado en una fiesta que desde hace muchos años logra unir a los vecinos en un espacio para la convivencia con familiares y amigos, con compañeros, con socios de las peñas y casetas abiertas de par en par, con otros roteños y también foráneos que siempre son bienvenidos". La Feria de Primavera, que "mantiene su espíritu abierto y familiar", es "un recurso turístico" y "una magnífica tarjeta de presentación de Rota".