Después del éxito obtenido desde 2011 por sus vinos Atlántida y Vara y Pulgar, vinos tintos 100% tintilla de Cádiz, la compañía Vinos del Atlántico sigue apostando por recuperar variedades autóctonas de Cádiz, que permiten obtener vinos excepcionales que reflejan las características propias del suelo albariza, el clima y las peculiaridades únicas del marco de Jerez.

Vinos del Atlántico, compañía fundada por Alberto Orte y Patrick Mata, comienza a elaborar vinos en distintos puntos de toda la península ibérica en el año 2002, y en 2011 empieza a elaborar vino en la provincia de Cádiz, en el marco de Jerez.

El proyecto de Vinos del Atlántico dentro del marco de Jerez va más allá de la elaboración de vino. En la actualidad, cuenta con 16 hectáreas de viñedo propio en el pago de Añina, perteneciente al marco de Jerez. Cuenta con tres viñas diferentes: San Cristóbal, El Aljibe y San José. La Viña San Cristóbal es un campo madre de variedades autóctonas blancas y tintas que después de un trabajo de más de seis años cuenta con una selección varietal y clonal de 30 viñas diferentes, con 21 variedades de uva y más de 200 clones varietales, entre los que hay una importante selección de palominos antiguos procedentes de viñas viejas de más de 60 años.

De ese campo madre es de donde se seleccionan las variedades de mayor interés para hacer una plantación mayor de viñedo. Todo el viñedo de Vinos del Atlántico es de cultivo ecológico y respeta al máximo los principios y tradiciones de la agricultura tradicional, utilizando la poda vara y pulgar y el marco de plantación antiguo del marco de Jerez.

Atlántida Blanco 2016, elaborado por el enólogo Alberto Orte, es su primer varietal de vijiriega blanca y el primero que se elabora en el marco de Jerez. Esta variedad, que era muy preciada y estaba plantada por toda la campiña de Jerez, desapareció de Cádiz con la filoxera y quedó presente sólo en alguna zona de Granada, Cataluña y Canarias. Ahora Vinos del Atlántico la ha traído de nuevo, la ha vinificado y ha sacado al mercado un vino único.

Atlántida Blanco 2016 se ha criado 12 meses en demimuds (barricas de roble francés) de 600 litros y, posteriormente, 6 meses más en un depósito de acero inoxidable. Su elaboración es artesanal, pisada a pie, con levaduras indígenas y sin control de temperatura.

El vino tiene un perfil de guarda más que de consumo inmediato, con una capacidad de ir mejorando con el paso de los años.