Mientras la maquinaria de la Demarcación de Costas, dependiente de la Administración del Estado, actuaba en el río Salado en el vecino Conil, bajo la supervisión personal del subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, a pocos kilómetros, cientos de peces se pudrían a la entrada de Zahara de los Atunes en plena temporada alta turística.

Ante la inacción de Costas y las explicaciones de De Torre, Agustín Conejo, alcalde-presidente de la Entidad Local Autónoma barbateña, ejecutó ayer la decisión de abrir hasta el mar el cauce del río Cachón gracias a la imprescindible y desinteresada colaboración de dos empresarios de la zona. Si el río se estaba secando y por eso morían los peces, la solución no podía ser otra que facilitar su desembocadura natural, de manera que las mareas terminasen regulando el cauce. Como sucede en cualquier otro río.

Antes, Agustín Conejo se curó en salud -administrativa, se entiende- y solicitó autorización a la Delegación Territorial de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. Le respondieron que no la necesitaba. Que ese tipo de actuaciones podían ser asumidas y ejecutadas por la Administración local. Y que en caso de no poder hacerlo, le correspondería a la Administración central. Eso es lo que hicieron. Pero se lo negaron

"Le pedimos ayuda a Costas varias veces, pero la respuesta del señor subdelegado ha sido dar la espalda a la evidencia: a cientos de peces muertos pudriéndose a las puertas de una población repleta de visitantes, con los olores, las molestias y la mala imagen que genera algo así", explica a este periódico el alcalde de Zahara de los Atunes. "Así que viendo que nos negaban la ayuda, no íbamos a permitir que el río se secase con toda esa masa orgánica en putrefacción y hemos solucionado gracias a la colaboración de dos empresarios locales", añade.

"Nos sentimos muy discriminados frente a otras poblaciones vecinas, como Conil, dónde sí que estaban trabajando las máquinas de Costas en un caso muy similar al nuestro", denuncia muy indignado Agustín Conejo. "¿Por qué en Conil sí y en Zahara no?", se pregunta. El alcalde avanza que tomarán las medidas jurídicas necesarias ante la actitud de Costas y del subdelegado.

La Junta de Andalucía también explicó ayer a este periódico su actuación en el cauce del río Cachón. Durante la jornada de ayer, efectivos de Medio Ambiente continuaron retirando peces muertos y algas en descomposición. Fuentes de la Administración autonómica detallaron que el delegado, Ángel Acuña, envió el pasado miércoles un escrito al Ayuntamiento pedáneo de Zahara de los Atunes en el que se daba respuesta a la petición de su presidente, Agustín Conejo, de proceder a la limpieza y apertura de la desembocadura del río Cachón.

Ante esto, la Junta detalló que según el artículo 225 del Real Decreto 876/2014, las labores para "mantener las playas y lugares públicos de baño en las debidas condiciones de limpieza, higiene y salubridad, entra dentro de las competencias asumibles por las administraciones locales, por lo que no se hace necesaria la autorización expresa desde esta Delegación Territorial". Y añade que, en el caso de que ese Ayuntamiento no pueda acometer dichas actuaciones, "será la Administración General del Estado, en el ejercicio de sus competencias de lucha contra la contaminación, extracción de restos, la que podrá ejecutar dichas actuaciones". Para finalizar, la Junta recuerda a la ELA de Zahara que "por parte de esta Delegación Territorial -de Medio Ambiente-, se está procediendo a las labores de limpieza y retirada de peces y otros restos en la zona de agua embalsada donde no tiene regeneración de agua, ya que el río se queda seco corriente arriba y no existe conectividad de la balsa del río con el mar". Por tanto, insta a dirigirse a la Demarcación de Costas para acometer estas actuaciones.