"Todavía no estoy vencido"

Manuel Rodríguez de Castro está en busca y captura. Las fuerzas de seguridad tratan de encontrar al ex delegado de la Zona Franca que fue condenado a ocho años de prisión por el llamado caso Rilco, juzgado en 2013 en la Audiencia Provincial y cuya sentencia ha sido confirmada por el Tribunal Supremo.

El ex delegado se puso en contacto hace unos días con este periódico con la intención de enviar un comunicado en el que nuevamente arremetía contra la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, tras la reprobación que hizo la corporación municipal del propio Rodríguez de Castro.

La llamada fue al teléfono fijo de este periódico y el comunicado lo hizo llegar a través de una dirección de correo electrónico con un dominio radicado en Montenegro, aunque esto no prueba que esté allí porque se puede abrir una dirección desde cualquier parte del mundo. Eso sí, es "un correo seguro pero que cambiará en el futuro", como especificó. En el mismo no aparece ninguna 'ñ', tal y como ocurre con los teclados extranjeros.

En ese momento todavía no se había hecho pública la orden de busca y captura. De hecho, Rodríguez de Castro aseguraba que todavía no debe ingresar en la prisión porque le quedan pasos judiciales por realizar y también se mostraba tranquilo pese a la situación que vive.

El comunicado era una defensa a ultranza del ex ministro Rodrigo Rato, que se encuentra investigado por la presunta comisión de varios delitos fiscales y alzamiento de bienes entre otros.

En este sentido, dijo que "la ingratitud y la traición se ceban con el mejor ministro de Economía que ha tenido España" y que "el silencio de los cobardes cae sobre él como una túnica de plomo". En el comunicado echa en cara "la falta de valentía" del PP cuando de defender a los suyos se trata. Sólo ponía como excepción la defensa que hizo Antonio Sanz de Miguel Osuna durante ocho años, "a fin de cuentas eran socios". Así, añade que el PP "se caracteriza por abandonar a los suyos en cuanto aparece un fiscal en el horizonte".

Rodríguez de Castro lanzó dardos contra Teófila Martínez, "que no sólo no puso la mano en el fuego por mí sino que lo avivó hasta que se convirtió en el primer fuelle de mi hoguera junto a Antonio Sanz, Jorge Moreno y demás recua de traidores del PP de Cádiz". Se intuye hasta una amenaza: "Ya les tocará su turno en estas notas, a todos, pues no estoy vencido aún y el fuego les acabará alcanzando. Palabra de legionario".

Dijo que durante 15 años fue "un leal militante" del PP hasta que tuvo que dejar el cargo: "Ahora soy libre de hablar pues, como todo traicionado, puedo cobrar caro el precio de la traición".

Aconseja que Teófila Martínez "debería poner la mano en el fuego por Rodrigo Rato. Veremos si se atreve y veremos si la pone por Santiago Cobo". Para terminar, otro aviso: "Si los gaditanos supiesen la verdad de Teófila Martínez en el caso Rilco probablemente no ganaría su reelección".