Los problemas en la construcción

El desabastecimiento de materiales provoca la paralización de obras en la provincia de Cádiz

Una obra en plena ejecución en Jerez de la Frontera.

Una obra en plena ejecución en Jerez de la Frontera. / Miguel Ángel González

El desabastecimiento de materiales de construcción pone en riesgo el desarrollo de diversas obras tanto públicas como privadas en la provincia de Cádiz, según se alerta desde la Federación de la Construcción gaditana. Esta situación de precariedad no se limita a nuestra provincia, ni a Andalucía: es un problema que se extiende por todo el país.

Una consulta realizada a más de 300 empresas del sector en España indica que cuatro de cada diez firmas ha tenido que paralizar o cancelar proyectos que ya tenían en marcha o que iban a ejecutar, tanto por la falta de los materiales más esenciales como por el precio de los costes ya disparados por culpa del incremento del precio de la electricidad.

Según Jorge Fernández-Portillo, secretario general de la federación gaditana, estos datos son extrapolables a la situación del sector en la provincia de Cádiz, donde menciona casos como la ausencia de cristal en las obras, lo que impide, por ejemplo, instalar espejos y, con ello, completar los trabajos. Igualmente se está notando cada vez más la falta de madera en muchos trabajos, lo que impide el normal desarrollo de los mismos.

Lo cierto es que este desabastecimiento unido a la subida del precio de la electricidad ha incrementado de forma más que notable el coste de las obras, con una subida media del 22%, lo que se considera como "insostenible para las empresas". Hay casos como el acero, cuyos precios se han disparado hasta en un 80%.

Todo ello supone que la mayor parte de los presupuestos ya aprobados en obras en marcha, o a punto de inciarse, han quedado totalmente desfasados, con unos costes muy por encima de lo previsto cuando se contrataron.

Fernández-Portillo asume que encontrar una solución inmediata es "muy difícil". Por lo pronto, desde la patronal se ha iniciado una campaña dirigida a los promotores privados "para que conozcan la realidad del mercado y tenga sensibilidad con las empresas del sector". A la vez, se buscan acuerdos con la Administración, aunque aquí parece más complicado.

"Las administraciones, aún queriendo y aunque algunas puedan disponer de fondos para afrontar los sobre costes provocados por la falta de materiales, chocan con el control de los precios que se impone en la Ley de Contratos", lamenta el secretario general de la patronal.

Este colectivo plantea a las administraciones la adopción de "medidas excepcionales para hacer frente a la desviación de los costes por causas ajenas a las constructoras" como está pasando en otros países europeos donde se están encontrando también con el mismo problema de desabastecimiento.

Esta situación está provocando la paralización de obras, o la imposibilidad de concluir en las fechas previstas. Y, también, el riesgo que supone para el empleo.

Cabe recordar que el pasado mes de agosto la patronal gaditana cuantificaba en 3.000 los empleos necesarios en la construcción, para afrontar todos los proyectos que se iban a realizar en los próximos meses en la provincia. Desde agosto la situación del sector, se afirma desde el mismo, se ha agravado de forma más que notable.

Todos estos temas se trataron en una junta directiva celebrada este martes por la Patronal Andaluza de Constructores.

En la reunión se acordó trasladar a la Junta, con la que se reconoce que hay una buena relación, la petición de la actualización inmediata de la base de costes de la construcción en la región, que permitiría relajar algo la situación económica en la que se encuentran muchas empresas andaluzas.

En este estado se encuentra el sector cuando en apenas unos meses se supone que habrá un notable incremento en los concursos públicos. La llegada del dinero procedente del Plan de Resiliencia va a activar centenares de obras en toda la provincia, algunas de gran calado. Proyectos que, por la imposición que acompaña a todos los fondos europeos, tienen un plazo de ejecución muy estricto para su desarrollo, algo que puede complicarse si se mantiene el desabastecimiento de los materiales de construcción en todo el mundo.

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