La Junta plantea un drástico plan de acción ante la pérdida de cruceristas

La Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía ha elaborado ya un borrador en el que plasma un plan de acción con la idea de desarrollar el segmento de cruceros dentro de la actividad turística andaluza.

Previo a la descripción de este plan de acción que pretende recuperar las idílicas cifras de cruceristas de los años 2010 y 2011, la Junta de Andalucía pone sobre la mesa los porcentajes del período comprendido entre 2007 y 2013. El año que finalizaba hace ya seis meses dejó cifras preocupantes muy similares a las del año 2009.

2013 sufrió un retroceso muy acusado, con una caída del 20,6% acercándose a esos niveles de 2009.

Ante tal situación, Turismo de la Junta ha preferido planificar una "parada en dique" para analizar qué está pasando antes de que realmente sea tarde y otras comunidades autónomas terminen canibalizando los tráficos de cruceros que hasta 2012 preferían, muy por encima de todo, las costas andaluzas.

En esa larga pensada que se ha permitido la Junta ha elaborado este borrador que incluye un estudio y una encuesta en la que Cádiz y Málaga son las auténticas protagonistas tanto por sus experiencias positivas como por las negativas. Así, la Junta, o mejor dicho su Empresa Pública para la Gestión de Turismo y del Deporte de Andalucía, llevó a cabo una encuesta a 852 pasajeros de cruceros con puntos de encuestación en Málaga y en la Bahía de Cádiz, que aglutinan el 93% de la actividad crucerística en Andalucía.

En este borrado del Plan de Acción Turismo de Cruceros se le da un papel vital ala compañía de cruceros que es la que decide, "no sólo el destino sino también el posicionamiento en escala o en base del buque". Del nombre de la naviera dependerá en buena parte la procedencia del turista y de ello, la tipología del crucerista y el potencial de desembolso económico en aquellas ciudades que visite.

Según el estudio, las navieras están en un momento en el que se han dado cuenta de que el nivel de su clientela no le cubre los gastos debido a los bajos precios de sus viajes y por el bajo nivel de consumo del pasajero a bordo del barco y el mínimo gasto en excursiones. Desde hace algún tiempo para acá el crucerista de nuevo cuño que decide hacer este tipo de viajes allá por 2007 prefiere dedicarle tres o cuatro horas a Internet y salir con todo planificado, excursiones incluidas, todo sin contar con los touroperadores oficiales.

Esta tendencia, tal y como plasma el borrador, ha provocado una retirada de parte de la flota del Mediterráneo de las navieras más populares y con los barcos de mayor tamaño, que consecuentemente transportan a un mayor número de viajeros. Dejan el Mediterráneo y se marchan al norte de Europa, Caribe, Brasil y Asís, con precios de venta más competitivos.

En esta modificación de rutas se suprimen muchas escalas tanto en tránsito como en base. En el caso andaluz, el caso de Cádiz no ha valido de mucho por la casi nula experiencia como puerto base, aunque sí, de mucho, la experiencia de Málaga que ha vivido la pérdida del AdventureoftheSeas, de la Royal Caribbean, que se llevó meses usando como puerto base a Málaga.

Otra consecuencia es que se está dejando de lado las largas rutas de hasta 13 y 14 días por oras mucho menores, de entre 5 y 7 noches.

En los puertos de Cádiz y Málaga Costa Cruceros, P&O Cruises y MSC Cruceros han sido las más compañías más vistas, acaparando el 45% del movimiento de pasajeros en ambos muelles. Estas navieras han alcanzado estos puestos precisamente por la pérdida de la cuota de Royal Caribbean, que ha pasado de captar el 26,3% de los cruceristas andaluces al 8,3% en 2013, lo que ha provocado de golpe un cambio en el mapa de navieras que escalan en Cádiz y Málaga. Sin embargo, anotar como positivo que Iberocruceros y Pullmantur ganan puestos en 2013 dejándose ver más en los puertos andaluces.

El estudio deja unos párrafos para analizar la distribución en el tiempo, siendo la primavera y el otoño, concretamente abril, mayo, septiembre, octubre y noviembre, los períodos en los que se han registrado más d de la mitad de los pasajeros recibidos en el año.

De todas formas, es justo recordar que Cádiz y Málaga han vivido de manera muy diferente el año pasado, ya que el muelle malagueño perdía casi un 40% de sus cruceristas respecto a años anteriores, mientras que el gaditano sigue al alza y ganó más de un 12%.

El estudio de la Junta se para en detalles tales como si el crucerista viaja en pareja, con familia o con amigos o o el gasto que hace en el puerto de origen o el gasto medio diario a lo largo de la ruta del crucero. En este último punto, las cuentas de la Junta de Andalucía resultan que el crucerista gasta una media diaria de 32 euros .

Con este análisis rico y pormenorizado, Turismo se plantea una serie de objetivos estratégicos con la finalidad de incrementar el número de cruceros y cruceristas que llegan a Andalucía. Y esto no sólo con el objetivo de enriquecer y colorear nuestras ciudades con los barcos y turistas sino también con el fin de aprovechar eso que ha denominado "pasajero de regreso". Es cada vez más común que los cruceristas repitan viaje a las ciudades que más le han gustado al visitarla en un crucero para así poder conocerlas con más tiempo y detenimiento.

El Plan apuesta por la complementariedad de la oferta andaluza haciéndole ver a las navieras que Andalucía les interesa y les puede resultar rentable.

En el estudio hablan de estrategias comunes que, por fin, dejen de lado las viejas rivalidades interportuarias entre los puntos de atraque andaluces.

En el plan andaluz se habla también de intensificar la cooperación y coordinación con los aeropuertos, sobre todo los puertos que tienen a ser base de algún buque o naviera. A su vez incluye la idea de la creación de una comisión de Turismo de Cruceros en Andalucía, liderada por Turismo Andaluz o la creación de la marca Andalucía Turismo de Cruceros, con un logo propio que lleve tras de sí una identidad propia y con una alta carga de Andalucía.

En general, actuaciones que ayuden a mejorar la rentabilidad de las navieras y a su vez del destino fortaleciendo una oferta complementaria con un valor añadido que sirva de imán para las navieras más populares.