El pregonero de la Semana Santa de Chiclana, Iván Roa, buscará transmitir este domingo “la ilusión por lo que vamos a vivir después de tanto tiempo”: “Quiero que los cofrades chiclaneros salgan del pregón con ilusión de que vamos a volver; haré algunas menciones a lo que hemos pasado pero sin ahondar en la herida, sin centrarme en todo lo malo que hemos vivido en estos dos años, sino en lo que está por venir”.

Este domingo, el Teatro Moderno acoge a partir de las 12.00 horas el pregón de la Semana Santa de Chiclana, que estará a cargo de este gaditano con gran vinculación con Chiclana, la ciudad en la que lleva viviendo seis años. El año pasado, en una Semana Santa excepcional, sin procesiones, ya fue el pregonero de la Semana Santa de Cádiz y del pregón de la Hermandad del Rocío de Chiclana. Sus pregones fueron muy bien acogidos por los cofrades gaditanos y chiclaneros.

“Para el cofrade en general ha sido muy duro… En esos pregones yo quise dar un empujón y esperanza a la gente. Todos sabíamos que no íbamos a salir de un día para otro de la pandemia y creo que el año pasado pusimos los cimientos para empezar a salir”, recuerda Roa, quien basó sus pregones “en la esperanza que siempre tenemos que tener”.

Roa cerró su pregón hace una semana y adelanta que incluirá mensajes y menciones para todas las hermandades de la ciudad. Será presentado por José Manuel Lechuga Melendez e intervendrá la banda de música Maestro Enrique Montero.

Además, al igual que el año pasado, su pregón estará, dice, “casi entero en verso, como me gusta hacer, con muy poca prosa y partes que riman incluso en la prosa”: “Quiero que al escucharme nadie sienta pena, sino más bien todo lo contrario: que recuerden que estamos saliendo, que este año ya hemos salido. Quiero dar ese último empujón para que la gente salga del Teatro motivada y con ilusión”.

El pregonero agradece a los cofrades de Chiclana el trato recibido durante los últimos meses, en los que ha tenido un gran contacto con los miembros de las hermandades de la ciudad, con los que ha compartido convivencias y distintos actos protocolarios. “No tengo palabras para describir cómo me están tratando como si fuese uno más, no lo olvidaré nunca”, concluye.