El PSC ordena a sus ediles en Vic rechazar medidas restrictivas en el padrón

La Comisión Ejecutiva del PSC ha dado órdenes a sus concejales en el Ayuntamiento de Vic (Barcelona) para que no apoyen cualquier modificación restrictiva en el padrón de la ciudad para dificultar el empadronamiento de los inmigrantes irregulares.

El portavoz y viceprimer secretario del PSC, Miquel Iceta, lo ha transmitido en la rueda de prensa posterior a la Comisión Ejecutiva del PSC, a la que ha asistido su primer secretario y presidente catalán, José Montilla, quien recientemente se reunió con el alcalde de Vic, el socialcristiano Josep Maria Vila d'Abadal. Iceta ha aprovechado para criticar al líder del PP, Mariano Rajoy, por mostrar comprensión hacia las intenciones iniciales del Ayuntamiento cuando, ha recordado, "fue él quien firmó en 1997 la orden" en la que se establecen los requisitos del padrón, en lo que ve una "contradicción".

El portavoz del PSC ha querido poner también "en contradicción" el "sentimiento humanitario" derivado de la catástrofe en Haití que expresan formaciones como el PP y "la falta de sensibilidad de algunos con la gente que está con nosotros", una "hipocresía" que "está condenada en la Biblia", ha ironizado. Los socialistas catalanes han decidido finalmente, tras más de una semana analizando la polémica cuestión, "instruir" a sus concejales a no apoyar la iniciativa del Ayuntamiento, asunto que esperan que ni tan siquiera acabe llegando al pleno municipal por considerarlo "ilegal".

El PSC ha sacado a relucir, además, un texto de la mesa de Ciudadanía e Inmigración, fruto del Pacto Nacional para la Inmigración y fechado el pasado 26 de octubre, en el que la Generalitat y las entidades municipales se comprometían por escrito a favorecer la inscripción en el padrón de todos los inmigrantes. Este acuerdo está firmado por uno de los concejales del Ayuntamiento de Vic, presente en dicha mesa, concretamente Joan López, regidor de Acción Social y Ciudadanía (ERC). "Nuestro partido rechaza los dos extremos: el buenismo, cerrar los ojos ante los problemas, y la xenofobia. Creemos en una inmigración regulada, que se ajuste a la legalidad, pero también la del sentido común y el humanismo".

El PSC rechaza que en un momento de "crisis" se deje ahora de lado a los inmigrantes, que deben estar empadronados por ser el único "control real" que permite dimensionar los servicios del municipio. Para Iceta, es "contradictorio" expresar un "sentimiento humanitario" por la catástrofe de Haití y, al mismo tiempo, evidenciar "falta de sensibilidad con la gente que está con nosotros y que trabaja" o que ahora se han quedado en paro, asegura, y añade que "es impresentable que en una situación de dificultad económica queramos exigir requisitos que antes de la crisis no pedíamos, es una falta de humanismo y de confianza en las posibilidades de este país, como si la crisis fuera a ser permanente". "No es posible llenarse la boca de justicia y de derechos humanos y a la vez negar la atención" a estos inmigrantes, ha señalado Iceta, que ha apelado al "sentido común", puesto que el padrón permite incluso a los ayuntamientos financiar sus servicios.