El Puerto

"Vemos llegar un tren de Madrid y nos da miedo"

  • Los taxistas portuenses  piden al Ayuntamiento que se les faciliten medios para desinfectar los vehículos

  • Numerosos madrileños están llegando estos días a zonas de vacaciones como Valdelagrana o Vistahermosa

Taxis junto a la estación de trenes de El Puerto

Taxis junto a la estación de trenes de El Puerto

Los taxistas de El Puerto de Santa María están preocupados ante la importante afluencia, en los últimos días, de personas procedentes de Madrid, tras haberse decretado allí a mediados de esta semana el fin de las clases en todos los niveles educativos.

Muchas familias con segunda residencia en El Puerto, sobre todo en zonas como Valdelagrana o Vistahermosa, están llegando estos días a la ciudad y muchas de ellas cogen taxis, por ejemplo en la estación. "Vemos llegar un tren de Madrid y nos da miedo", dice Pedro, uno de los taxistas portuenses que en media hora ya ha hecho cuatro viajes. "Algunas de estas personas nos dicen que han salido de Madrid por miedo, porque allí la cosa está muy mal", explica.

Entre los taxistas hay preocupación porque como dicen, "nos recomiendan extremar la limpieza y la desinfección de nuestros vehículos pero no hay manera de encontrar líquido desinfectante, está agotado en todos los comercios. Yo estoy limpiando el taxi con agua y alcohol, es lo único que puedo hacer, y decirles a los viajeros que se sienten detrás".

Ante esta situación los taxistas han instado al Ayuntamiento a que les provea al menos de material desinfectante, para no tener que sufrir el desabastecimiento actual de este tipo de productos.

También son muchos los estudiantes universitarios residentes en Madrid que estos días han vuelto a sus casas, al no tener clase durante dos semanas. Algunos de ellos han decidido, como medida de precaución, quedarse en casa sin salir durante unos días, pero es cierto que se trata de una opción personal que no todo el mundo está aplicando de la misma manera.

Este viernes, incluso, se ha vivido algún episodio de tensión en un conocido establecimiento de la Costa Oeste al que han acudido varias familias de Madrid, siendo recriminadas por el resto de los clientes ante el hecho de que no hayan permanecido durante la cuarentena en su ciudad.

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