Los talleres de Olioz Arte, en Rota, han comenzado a trabajar en la restauración del paso del Cristo Yacente de la hermandad de La Soledad, una labor que en su primera fase está prevista que se desarrolle hasta antes de la Semana Santa del año próximo.

El plateado de las andas del Santo Entierro no se encontraba en muy buen estado por lo que se decidió darle un nuevo baño de plata a toda la estructura del paso. No obstante, no está dentro del proyecto la restauración la urna del Cristo Yacente.

En esta primera fase de los trabajos, se restaurará el canasto al completo, que debe estar listo antes del Viernes Santo del año próximo. Mientras, el resto de la restauración se acometerá en sucesivos años conforme se tengan los fondos necesarios.

Desde el año pasado, la hermandad está realizando diversas actuaciones para recaudar dinero. Así se han solicitado aportaciones extraordinarias a los hermanos, se organizó una cena el pasado verano y se han realizado excursiones donde parte del precio se destinaba para la restauración del paso. Asimismo, la hermandad aprovechando que en el tercer viernes de cada mes se abre la capilla que tiene en la Iglesia Mayor Prioral, se instala una mesa informativa del proyecto donde, además, se pueden adquirir diversos recuerdos sobre las imágenes de la cofradía.

La pasada semana se celebró un cabildo de hermanos donde se informó de la situación del proyecto de restauración (que fue autorizada meses atrás por la comisión de arte sacro del Obispado de Jerez) y del inicio de los trabajos.

El paso del Cristo Yacente fue realizado por el orfebre sevillano Ángel Gabella en 1976 tras una donación del hermano mayor a perpetuidad de la cofradía José Luis Osborne Vázquez. Mientras, la urna data de 1896 y fue realizada en los talleres del sevillano Lastorres. Por su parte los cuatro candelabros de cinco brazos que iluminan cada una de las esquinas del paso fueron realizadas en 1886 aunque fueron restauradas en 1996.