El Partido Popular de El Puerto denuncia públicamente que los grupos de izquierda del Ayuntamiento portuense "se alían para bloquear los presupuestos municipales aprobados en el Pleno en su fase inicial".

Hay que recordar que los presupuestos se aprobaron por la mínima,  haciendo uso del voto de calidad del alcalde, ya que Vox se abstuvo, votando en contra el resto de los grupos municipales -en los que faltaba una edil socialista- y por estar el gobierno municipal en minoría.

Desde el PP argumentan que "las elecciones se aproximan y la tensión sube entre los distintos grupos municipales de la izquierda, que cierran filas para derrotar al equipo de Gobierno de Germán Beardo, conscientes de que es su ejecutivo el que está impulsando la ciudad de El Puerto de Santa María hacia un avance sin precedentes, situándola de nuevo como locomotora de la Bahía".

De este modo, según el PP "PSOE, Adelante El Puerto y Unión Portuense se posicionan con un objetivo común: paralizar el normal funcionamiento del Ayuntamiento y frenar la recuperación y transformación de la ciudad".

Según los populares "los tres grupos de izquierdas representados en la Corporación municipal han presentado alegaciones al presupuesto para evitar su aprobación definitiva y entrada en vigor, sabiendo que levantan la mano en contra de la ciudad sólo para dañar al Gobierno actual. Este bloqueo supone votar en contra de la inversión que proyecta reformar el cementerio con 50.000 euros presupuestados, paralizar las obras de transformación de Pozos Dulces, la ejecución del Paseo Fluvial, la mejora de los servicios municipales –con más dinero para limpieza, parques y jardines- o de las instalaciones deportivas, pintar las calles o iluminar de norte a sur la ciudad para impulsar el ahorro energético... y suma y sigue hasta completar los 96 millones de euros que contempla el presupuesto entre gastos e inversiones", señalan.

El secretario local del PP portuense, Javier Bello, cree que "a pesar de que Germán Beardo ha sacado adelante un presupuesto de ciudad sin ningún tipo de interés partidista, donde mejorar El Puerto y la calidad de vida de los portuenses es lo único que se busca, es evidente que para el PSOE, Adelante El Puerto y Unión Portuense sus propios intereses son más importantes que la ciudad para la que gobiernan,  una estrategia que desde el Partido Popular de El Puerto denunciamos públicamente para que los ciudadanos estén informados de su modo de actuar y tomen buena nota, porque efectivamente las elecciones se van acercando para todos, no sólo para el actual gobierno”, recuerda.

Para el PP "mientras el Gobierno trabaja De la Encina, olvidándose de su pasado y nefasta o inexistente gestión, se dedica ahora a incendiar el ambiente con la única intención de atacar al actual alcalde, sin tener en cuenta que en ese ataque desesperado perjudica a la ciudad y a sus vecinos, que fueron los que decidieron que no siguiera en las urnas que por cierto nunca ganó, sino que ocupó mediante un pacto tripartito, aliándose con Izquierda Unida y Podemos”.

Bello continúa diciendo que "a su lado nos topamos con los comunistas de IU, que ya han roto sus relaciones con Podemos y abandonan su forma de trabajar para que de nuevo sus siglas tomen mayor protagonismo con el único objetivo de mantenerse en la corporación de cara a los próximos comicios. Han presentado 48 medidas, unificándolas en 14 alegaciones y la petición de 8 millones de euros para desarrollar políticas de pensamiento extremo, al estilo de Pablo Iglesias, pero sin darse cuenta de que los portuenses huyen de ideologías radicales porque lo único que les interesa son las soluciones a los problemas históricos de ciudad -que la izquierda jamás ha sabido resolver".

Y por último, sigue el secretario general del PP portuense, "nos encontramos con Unión Portuense, que aunque a priori parecía que era el único grupo que podía entender en qué consistía la presentación de alegaciones, de nuevo se ha pasado de frenada, dejándose llevar una vez más por su animadversión manifiesta hacia la gerencia de El Puerto Global en una cruzada personal en la que quiere arrastrar al Gobierno de Germán Beardo, en una guerra política que nada aporta ni beneficia a la ciudad ni solventa las necesidades y problemas de los portuenses”, concluye.